Zapatero promete acabar con la arrogancia política y el uso electoral del terrorismo

El polideportivo Ciudad Jardín de Alicante, con capacidad para unas 1.500 personas, se quedó anoche pequeño en el mitin que ofreció José Luis Rodríguez Zapatero. Fuera del pabellón otras 500 personas seguían el acto a través de pantallas instaladas para la ocasión. El secretario general del PSOE, recibido al grito de presidente, se comprometió a acabar con la arrogancia y la prepotencia en la vida política española, así como a luchar contra el terrorismo y a no usarlo como arma electoral como, a su juicio, hace el PP. "Os prometo un gobierno de hombres y mujeres, que lo sean para todos, y no un gobierno sólo para el partido y sus amigos; un gobierno que defienda una vivienda digna, la escuela pública y que convierta la cultura en un instrumento de progreso social".

Zapatero recordó su apoyo a las reivindicaciones sociales de estudiantes, afectados por la catástrofe del Prestige, los trabajadores que sufrieron el decretazo o los ciudadanos que rechazaron la guerra de Irak. "Mientras yo hacía eso, Mariano Rajoy aprobaba leyes que iban contra todos estos colectivos". El político socialista también anunció que hará del diálogo su referente para gobernar España y destacó que todavía existen diferencias entre un gobierno de derechas y otro de izquierdas. "La economía que ha de ir bien no es la de las cifras, como cree el PP, sino la de los ciudadanos. Y yo os prometo un gobierno con dignidad para defender a nuestro país, pero que sepa decirle no al señor Bush". Tras reiterar que sólo gobernará si cuenta con más votos que el PP, Zapatero agregó que el PP "no tiene credibilidad para dudar de mi palabra".

Zapatero apostó por un país que no divida a Europa sino que base su futuro en la educación y la formación de las personas, donde cuenten sus capacidades "y no la cuenta corriente de sus familias". Para ello, solicitó el apoyo a las candidaturas socialistas "de una tierra que siempre ha sido progresista".

El secretario general del PSPV-PSOE, Joan Ignasi Pla, habló nada más subir a la tribuna de lo dura que será la campaña: "No nos lo van a poder fácil, porque no vamos a contar con las televisiones y los medios, por eso necesitamos contar con el ánimo y la voz de miles de militantes socialistas para dar a conocer nuestro programa". Pla recordó unas declaraciones del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, en la que ofreció toda su colaboración al partido para llevarlo a la victoria el 14-M. "Pues bien, el gobierno está para gobernar y no para servir a un partido político".

Leire Pajín, cabeza de lista por Alicante, denunció los altos niveles de delincuencia, la elitista política de vivienda del PP o la falta de inversiones en la educación pública. Y arremetió contra los dirigentes Mariano Rajoy, Federico Trillo (cabeza de lista del PP) y Eduardo Zaplana, a los que se refirió como "el señor del chapapote, el señor de la guerra y el señor de las mentiras".

Zapatero desarrolló ayer una apretada agenda de actos en Alicante. Por la mañana visitó la Universidad de Alicante, acompañado de Pla y Pajín. Después visitó dos empresas de calzado en Elche y a continuación almorzó con unos 80 socios del Rotary Club de Benidorm.