Encuentro de titiriteros en el festival de Alcalá la Real
Don Cristóbal en España, Puch en Inglaterra, Guiñol en Francia, don Roberto en Portugal y Polichinela en Italia, no son más que las distintas caras de un mismo personaje, la cachiporra, el títere por excelencia, que ya en las plazas de la Edad Media buscaba la participación del público con un lenguaje provocativo. Y cómo no, este personaje no podía faltar en Titereal, el festival internacional de títeres para adultos de Alcalá la Real (Jaén).
Nueve compañías procedentes de Australia, Rusia, Chile, Italia y España han invadido durante este fin de semana el paseo y el teatro alcalaíno con sus espectáculos, demostrando que el mundo del títere va más allá de los estereotipos que le relacionan exclusivamente con el público más infantil. Porque cuando un muñeco entra en escena, "se llena de vida y crea un momento mágico que fascina y atrapa tanto a pequeños como a mayores", explica Carlos Tiniero, miembro de la compañía argentino-chilena Chon-Chon.
Titereal, organizado por el Ayuntamiento de Alcalá la Real y la compañía de teatro de Fernán Cardama, se ha convertido en uno de los festivales más importantes de España junto a los de Sevilla, Segovia y Lleida, con los que el Ayuntamiento alcalaíno colabora. Ana Cortecero, concejala de Cultura, recuerda que lo que empezó en solitario hace cinco años con tres espectáculos, ha derivado en un "punto de encuentro".
