Uróc Teatro muestra el humor y el suspense de Antonio Muñoz de Mesa

Cada vez que un dramaturgo español estrena, se demuestra un poco más algo que los profesionales de la escena dicen hace tiempo: hay un teatro español sólido y solvente emergiendo con fuerza. Una muestra se encuentra en el Galileo Teatro, con la obra Objetos perdidos, del joven Antonio Muñoz de Mesa, dirigida por Petra Martínez.

Su autor irrumpió en el panorama de las últimas tendencias escénicas madrileñas en 1996, con el montaje Torrijas de cerdo, al que siguió Internautas. Ahora es su último texto el que ha sido puesto en escena por Uróc Teatro, grupo cuyos montajes siempre están marcados por el humor. Fundado en 1985, es heredero de compañías como Tábano, El Búho y El Gayo Vallecano y es considerado por muchos profesionales de la escena el último y único bastión del teatro independiente iniciado en los años sesenta y setenta. Al frente de Uróc están los actores Juan Margallo y Petra Martínez.

Objetos perdidos es una hilarante comedia de situación que ha empujado a esta conocida actriz a la dirección: "Es una obra que reúne muchas cosas que me interesan y me gustan, por lo que me sentí desde el principio predestinada por los dioses para ponerla en pie", dice Martínez. Esos elementos que le interesaron especialmente son el absurdo y el suspense, e incluso un punto de cursilería. "Es una obra muy tierna y tiene mucho que ver con lo que nos está pasando a todo el mundo, que nos ponemos a buscar algo que creemos haber perdido y no nos damos cuenta de que lo tenemos; es una reflexión muy interesante sobre la sociedad de consumo", explica la directora.

Por otra parte, el festival Escena Contemporánea continúa ofreciendo su programación de espectáculos innovadores y rompedores. Hoy se estrena -con entradas agotadas- en un salón de bodas Alejandro y Ana, una visión muy personal sobre lo que no se pudo ver de la boda de la hija del presidente del gobierno, puesta en pie por el grupo Animalario.

Mañana, Accidente esperando a ocurrir, de Carlos Fernández, llega a la sala de El Canto de la Cabra. Un trabajo de teatro-danza para el que su autor se ha inspirado en la ciudad, observada con cuidado: "Hablo desde la fascinación y el poder de evocación que me provocan paisajes humanos y transeúntes", asegura.

Objetos perdidos. Galileo Teatro. Galileo, 39. Miércoles a viernes a las 20.30. Sábados a las 20.00 y 22.30. Domingos a las 18.30. Entradas de 9 a 12 euros. Accidente esperando a ocurrir. El Canto de la Cabra. San Gregorio, 8. Entrada de 8 a 10 euros. Del 19 al 22 de febrero, a las 21.00.