Ejercicio cerrado
Los inversores españoles ya dan por cerrado este ejercicio del que restan un par de sesiones. La acumulacion de fiestas, por un lado, y de tensiones, por otro, han forzado este temprano final que se ha notado sobre todo en el volumen negociado.
La contratación en el Mercado Continuo fue de tan sólo 746,12 millones de euros, una vez descontados los 1.012,36 millones que se generaron mediante operaciones institucionales.
La jornada en sí careció de interés, a pesar de algunos conatos de mejora a cargo de unos cuantos valores de primera fila que parecen ser un intento final para ofrecer una cara más amable a los accionistas e invitarles a mantener sus posiciones en los primeros compases del año que viene, que no se presenta, precisamente, cargado de atractivos.
El Ibex 35 terminó la sesión con un discreto avance del 0,52% y el índice general de la Bolsa de Madrid ganó el 0,37%, gracias a los repuntes de SCH, Telefónica, Endesa y Repsol YPF. En el resto de Europa la respuesta de los inversores resultó desigual, con un avance del 0,15% en París y un recorte del 1,68% en Francfort, poco antes del cierre. La Bolsa de Londres subió el 1,21%.
Wall Street registraba numerosos altibajos, en parte como reacción a las caídas de la semana anterior, pero sin lograr darles estabilidad. Las tensiones con Irak continúan aumentando como si de un calendario se tratara, lo cual hizo que los inversores se inclinaran más por la retirada y que pasaran de largo sobre un par de buenos datos económicos, como eran el incremento de los ingresos personales en noviembre en un 0,3% y de los gastos en un 0,5%, siendo este último dato el mejor desde el pasado mes de julio. Dado el ambiente, pesó más el dato final de la confianza de los consumidores en diciembre, que cayó tres décimas.
