6.300 firmas, en protesta por la plaga de mosquitos de Torrejón

A las 19.30 la situación es insostenible en algunos barrios de Torrejón de Ardoz: los mosquitos que desarrollan su ciclo vital, según un estudio de la Universidad Complutense, en la ribera del río Henares salen a por sangre a última hora. Los niños se echan repelente en vez de crema solar en la piscina. Las viviendas próximas al río se defienden con mosquiteras y 6.300 vecinos han presentado sus firmas a la alcaldía y a la Comunidad. Quieren que 'la plaga de mosquitos' se trate como un asunto de salud pública. Un informe técnico del Consistorio afirma que el foco del problema se sitúa en el entorno del río Henares.

'Las hembras de la especie Ochletoratus caspius son agresivas y tienden a picar de la cintura a las rodillas. Pueden provocar reacciones alérgicas fuertes', afirma Rosario Melero, una de las autoras del estudio de la Complutense. Para determinar las características de los mosquitos se utiliza, en ocasiones, un cebo humano: una persona de pie permite que los insectos le piquen. Hasta doce mosquitos en un minuto han clavado su aguijón sobre las personas que han actuado de blanco.

El informe del Ayuntamiento de Torrejón concluye que el foco de mosquitos caspius se encuentra en el entorno del Henares y que se debe 'eliminar de forma prioritaria el inmenso foco larvario de la especie que existe en las tierras encharcadas en el margen izquierdo del río: la finca Soto de Aldovea'. Este terreno pertenece al municipio de San fernando de Henares. El informe propone dos soluciones para acabar con las larvas: eliminar el encharcamiento de las tierras mediante el abandono definitivo de las prácticas de riego por inundación, y efectuar el volteo de tierras para dejar a la intemperie los fangos que han estado encharcados: de esta forma las larvas de los mosquitos morirían por las heladas. La empresa Peña Jara SL., arrendataria de la finca para explotación de ganado, afirma que las tierras sobre las que se pedía el volteo ya están roturadas y que el problema no está en la finca, sino en el cauce del río, 'por los cienos que trae', según el administrador, Manuel Rueda.

El concejal de Medio Ambiente de San Fernando, Joaquín Martínez, cree 'que se está magnificando el problema de esta finca. No es el único foco en el que se desarrollan mosquitos'. La empresa Saniterpren, que hace las tareas de fumigación para el Concejo, no detectó el pasado 6 de junio ningún ejemplar de caspius en la finca.

Los vecinos de la urbanización Torrenieve, en el Parque Cataluña, cercano al arroyo Ardoz y al Henares, se quejan: 'No podemos cometer la osadía de salir a regar el jardín tranquilamente. Nuestros hijos tienen que ir a urgencias porque las picaduras los ponen como monstruos'. Alfonso Sacristán, uno de los afectados, concluye: 'Llevamos con esto más de cuatro años y no parece que vaya a terminar. Nadie hace nada por acabar con el problema'.

El año pasado, un mosquito trasmitió la malaria a una vecina de Torrejón. Las autoridades sanitarias descubrieron que el insecto no había nacido en el Henares, sino que había venido en avión desde una zona de riesgo.