Mujeres armadas de paz

Zameret Hershco y Huda Imam dieron ayer una lección de civismo, de humanidad, de esperanza en el ser humano, de voluntad, de convivencia, de respeto, de tolerancia. Una lección de paz. Y una lección, sobre todo, de que el movimiento se ha de demostrar andando y que, como decía la socióloga Agnes Heller, hay que intentar lo imposible porque, la verdad, sólo es imposible porque así lo han decidido que lo sea. Zameret Hershco es israelí, nacida en Haifa. Huda Imam es palestina, nacida en Jerusalén. Ambas, juntas, participaron ayer en una conferencia titulada Mujeres de Israel y Palestina por la Paz, que se celebró en la Universidad Jaume I de Castellón. Sus diferencias, muchas, son mínimas si al otro lado de la balanza se sitúa su máximo deseo: la paz.

Hershco lo dijo bien claro. 'No es habitual, ni común, que una israelí esté sentada junto a una palestina. Es un hecho excepcional', apuntó, hecho que también destacó la presentadora del acto, la catedrática Purificación Escribano. Pero ambas se sentaron y dialogaron y debatieron sobre problemas comunes. Y no llegaron a ninguna solución, pero estuvieron. Aunque sus gobiernos las consideren 'traidoras' por el simple hecho de sentarse, físicamente, al lado de uno de sus 'enemigos'. Ambas entremezclan las palabras libertad y paz. Aunque, a veces, piensen que trabajan en pro de una falacia, de una utopía, una paz que, todavía se ve lejana, pero para la que ocupan la mayor parte de su tiempo.

Huda Imam es directora del Centre for Jerusalem Studies de la Universidad Al-Quds, la única institución árabe de estudios superiores en Jerusalén, que cuenta con más de 5.000 estudiantes. En su lucha por reafirmar la presencia palestina en Jerusalén, esta universidad ha iniciado un programa educativo en el que el centro que dirige Huda Imam es un referente. A pesar de las presiones políticas que dificultan su labor, la Universidad Al-Quds se esfuerza por llevar adelante iniciativas en pro de la educación. Huda Imam también trabaja activamente en el Jerusalem Center for Women, una institución no gubernamental palestina dedicada a la lucha a favor de los derechos humanos. Este centro desarrolla programas de igualdad en los que intervienen mujeres palestinas e israelíes. 'No es una tarea fácil', asegura, y menos después de las últimas masacres y de los ataques suicidas, un cáncer que espera que no prospere entre las nuevas generaciones.

Zameret Hershco tiene un amplio currículum en la defensa de los derechos de las mujeres. Durante más de diez años ha llevado a cabo trabajos en un centro para mujeres maltratadas en la ciudad de Haifa y ha colaborado activamente en el centro feminista Women to Women de esta misma ciudad. Ha desarrollado actividades a favor de la libertad de las mujeres en Israel, lo que la convierte en una referente de gran importancia en esta área. Además, pertenece a la organización Mujeres de Negro, una red mundial de mujeres que luchan activamente por la paz con una clara oposición a la guerra y la violencia.

El acontecimiento bajo el que se organizó esta conferencia no pudo tener mejor inicio: la presentación de la Fundación Isonomía para la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres social, económica, laboral, educativa y culturalmente desfavorecidos que sean susceptibles de sufrir discriminación. Aunque no hay igualdad posible sin una vida en paz. Y por eso el de ayer fue un buen comienzo.