La Administración consensúa una normativa para los invernaderos
La Subdelegación del Gobierno, la Junta y 25 ayuntamientos de la provincia de Granada han consensuado una ordenanza para regular la instalación de cultivos bajos plástico que, en los dos últimos años, han crecido a un ritmo de una hectárea por día. La normativa, que los ayuntamientos, en virtud de su autonomía municipal deberán decidir si adoptan como ordenanza, obliga a los propietarios de las explotaciones a acometer medidas correctoras para reducir el impacto paisajístico y a disponer de cubas para almacenar el agua de lluvia para el riego.
La normativa establece la obligación de respetar una zona de protección de 100 metros entre los invernaderos y los espacios marítimos. También prohibirá la conversión en zonas agrícolas los terrenos sobre pendientes superiores al 25%.
La ordenanza también pone remedio a los problemas derivados de la contaminación y exige a las explotaciones disponer de contenedores para los residuos orgánicas. Entre los núcleos urbanos y la zonas agrícolas deberá haber una franja de protección de 100 metros. La norma propone sancionar con multas de 3.005 a 30.050 euros a quienes incumplan lo recogido en la norma.