La Guardia Civil halla 123.000 pastillas de 'éxtasis' en Benicàssim

La colisión entre un camión y un turismo posibilitó el jueves que la Guardia Civil de Castellón se incautara de un total de 123.000 pastillas de éxtasis, camufladas en el vehículo que abandonaron dos individuos que huyeron momentos después de la colisión. Se sospecha que las pastillas iban a ser distribuidas durante estos días en Cataluña y en varios países europeos, como Francia e Italia.

El turismo en el que las transportaban fue alquilado en Málaga. El subdelegado del Gobierno en Castellón, Vicente Sánchez Peral, manifestó que, hasta el momento, éste es el más importante alijo de éxtasis incautado en la Comunidad Valenciana.

El siniestro se produjo a las 3.45 de la madrugada en la autopista A-7, entre los términos de Oropesa y Benicàssim. Ambos vehículos circulaban en dirección a Barcelona cuando, al parecer, el camión, por motivos que por el momento se desconocen, colisionó por alcance con el turismo. El turismo sufrió graves daños en la parte trasera y en el lateral izquierdo, lo que impidió que siguiera su marcha. Del turismo, un Ford Focus, bajaron dos individuos que apenas intercambiaron unas palabras con el conductor del camión. Segundos después, saltaban la valla de protección de la autopista e iniciaban su huida, campo a través, en dirección a la localidad costera de Benicàssim.

Cuando los agentes de la Guardia Civil de Tráfico acudieron al lugar, y tras el relato del camionero, descubrieron en un doble fondo habilitado en el maletero del turismo abandonado un centenar de paquetes, metidos en pequeñas bolsas de plástico, con pastillas. Ante el hallazgo, el vehículos fue trasladado a las dependencias de la Guardia Civil donde, con la ayuda de un perro detector de drogas, se descubrieron otros 23 paquetes. El sistema de ocultación de las pastillas fue definido por Vicente Sánchez Peral como 'muy sofisticado'. Las que fueron halladas en el interior del vehículo se encontraban, al parecer, en la funda del respaldo del asiento del conductor y en un doble fondo de la puerta del copiloto.

Todas las pastillas tienen el símbolo del euro en una de sus caras y, según Sánchez Peral, su venta en el mercado hubiera ascendido a más de tres millones de euros (más de 500 millones de pesetas). El subdelegado del Gobierno en Castellón señaló que el vehículo había sido alquilado en Málaga por un individuo que presentó un pasaporte búlgaro. Al parecer, éste era uno de los ocupantes. El otro, según fuentes de la Guardia Civil, tenía acento italiano. Uno de ellos fue descrito como un hombre de entre 50 y 60 años y de entre 1,65 y 1,70 de estatura, semejante a la del segundo individuo que, al parecer, es más joven. El dispositivo iniciado por la Guardia Civil cuenta con un helicóptero para la búsqueda de ambos.

Al parecer, los euros de éxtasis entraron en España por Málaga e iban a ser distribuidos, sobre todo, por Francia e Italia, según las gestiones realizadas hasta el momento. Sin embargo, Cataluña era otro de los destinos de al menos parte del alijo intervenido.