_
_
_
_
_
Reportaje:

La subasta del príncipe dorado

La cadena estadounidense ABC estrena 'El soltero', un concurso donde un joven profesional elige esposa entre 25 mujeres

Las mismas mentes enrevesadas que crearon ¿Quién quiere casarse con un millonario?, aquel especial de la Fox que acababa en boda, acaban de estrenar en otra cadena de Estados Unidos, la ABC, un concurso de seis episodios en cuyo nombre está el premio: The bachelor (El soltero). Veinticinco mujeres con varias cosas en común (principalmente las medidas corporales y el ansia por encontrar marido) compiten por convertirse en futura esposa de Alex Michel, un tipo aparentemente inteligente y moderadamente atractivo.

Veinticuatro de las 25 mujeres serán despreciadas en directo, lo cual no significa que a la ganadora le espere un futuro honroso: puede convertirse en la nueva Darva Conger, que se casó a ciegas con el millonario de ¿Quién quiere..., del que luego salieron a la luz sus antecedentes por abuso sexual. Conger pidió el divorcio a la semana siguiente y acabó ganándose la vida posando desnuda en Playboy, aunque ni siquiera en las páginas centrales.

El soltero, de 31 años, siempre bien trajeado y con cierto parecido a un joven Kennedy, es licenciado en Harvard y Stanford, experto en historia y literatura, pero desafortunado en su vida sentimental.

El concurso cuenta con un elemento que a estas alturas del género ya parece indispensable: un presentador acartonado que arranca el primer episodio con la frase 'me llamo Chris Harrison y soy un hombre felizmente casado'. 'No como otros', parece querer añadir.

Lo siguiente es un desfile de atributos en forma de 25 mujeres dispuestas a casarse con un hombre al que acaban de conocer y del que por el momento sólo saben que 'está buenísimo', según cuchichean por lo bajo en la mansión de Malibú (California) en la que se graba el programa. Hay entre ellas desde licenciadas en medicina hasta bailarinas de ballet, pasando por alguna de profesión no definida, pero dedicación entusiasta a la caza del marido.

'La mujer que escoja al final ha de ser inteligente', asegura Michel en aparente contradicción con el hecho de que las candidatas son, al fin y al cabo, participantes en un concurso de televisión. Recibe a las mujeres una a una en la puerta del palacio y después conversa con ellas por separado.

Al final del primer episodio entrega 15 rosas en reconocimiento a los encantos físicos de quienes, sólo por eso, han logrado el mérito de pasar a la segunda fase. Las 10 descalificadas se vuelven a Idaho o Minnesota, de donde nunca debieron salir; alguna incluso llora delante de las cámaras ante semejante despecho.

Los cinco capítulos que restan contienen la parte sexual del concurso, a juzgar por las imágenes con las que se promociona el espacio. Falta por saber si habrá boda al final, pero siendo la ABC propiedad de Walt Disney, cabe imaginar que los pecados se redimirán en el altar.

Más de mil mujeres trataron de estar entre las 25 que buscan marido en este nuevo concurso-reality. Diez millones de personas se engancharon al primer episodio.

Alex Michel y algunas de las concursantes de <b></b><i>El soltero.</i>
Alex Michel y algunas de las concursantes de El soltero.ASSOCIATED PRESS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_