El Celta se lleva un susto de muerte ante un Tercera
El subcampeón, que llegó a ir perdiendo 2-0, sólo pudo superar al Lemona en la prórroga
El Lemona hizo temblar al Celta. Un sólo partido jugado y el primer ilustre que se llevó un buen susto. Respiró de alivio cuando, a falta de cinco minutos para el final del tiempo reglamentario, forzó la prórroga. Fue entonces, sólo entonces, cuando consiguió zanjar el asunto. Al final, ganó por 2-3. El partido único ya hizo estragos el pasado año en la Copa y, por lo visto, amenaza con hacerlo de nuevo en éste.
El Celta, actual subcampeón, acudió al campo del equipo de menor rango de la Copa. El Lemona era el único representante de Tercera que competía. Pero en esta competición no se sabe de galones. El equipo de Víctor Fernández sufrió en un campo, Arlonagusia, pequeño y trompicado. Lo conocen muy bien los chicos de Iñigo Rocky Liceranzu, un viejo león, autor del gol que supuso la última Liga para el Athletic, en los ochenta. El club vizcaíno jugaba ayer por primera vez contra un primera.
El Lemona encontró a su propio héroe, Rubén Ruiz. Él, con sus dos goles en los primeros 20 minutos, dejó contra las cuerdas al Celta, que no reaccionó hasta el último cuarto de hora. Eso sí, terminó el partido de carril: dos goles antes de la prórroga (de Doriva y Catanha) y otro, el de la victoria, de Edú, al inicio del tiempo extra.
Los vigueses, abanderados del buen fútbol, cuartos en la Liga, un equipo que lleva años acumulando piropos, sufrió como un condenado. El partido único, una modalidad que no es del agrado de los conjuntos grandes, que corren el riesgo de darse un tremendo y vergonzante batacazo ante los pequeños, y se lo dan, pero que revitaliza la competición con la sangre fresca de la incertidumbre, amenaza con mandar de vuelta a casa a unos cuantos equipos de Primera.
