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Otro brote de peste porcina en Tuéjar obliga a sacrificar 18.000 cerdos

Tres semanas después de que el foco de peste porcina de Alpuente se extendiera a Titaguas, también se ha detectado en Tuéjar, donde ayer se confirmó un nuevo brote, el séptimo en la comarca en un mes. La confirmación corroboraba una situación previsible por la proximidad de los pueblos afectados y la densidad de granjas en la zona.

La explotación de Túejar infectada con peste tenía 4.000 cabezas de cebo y 500 madres que Agricultura ordenó sacrificar de forma inmediata. La medida también afecta a 14.000 cerdos de 17 explotaciones en el radio de un kilómetro alrededor del brote. El municipio tiene entre 35.000 y 40.000 cerdos. Estos sacrificios, unidos a los 32.174 animales muertos hasta la fecha, habrán supuesto la eliminación de la mitad de la cabaña de Los Serranos, estimada en 100.000 cerdos. El brote de Tuéjar, detectado en los terceros análisis, confirma la instalación de la enfermedad en el corazón ganadero de Los Serranos. Los tres municipios afectados tienen 112 de las 200 explotaciones porcinas de la comarca. Todas ellas están inmovilizadas por la detección de brotes, por lo que la este último sólo supondrá la paralización de una nueva granja, en Chelva. Las sospecha apuntan a que el virus primario de los brotes viene de países del Este.

En cualquier caso, a las pérdidas por sacrificio y posterior inactividad, se une la preocupación ganadera por la saturación de las granjas tras un mes de inmovilización. Por ello, Agricultura ha pedido al Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) que intervenga en las zonas restringidas para que se permita a los ganaderos sacrificar los animales en matadero, para su posterior destrucción, y recibir indemnizaciones a precio de mercado. Si el Ministerio no acepta la propuesta, el comité estudiará la posibilida de sacrificar todos los animales de las 45 explotaciones inmovilizadas en el radio de 10 kilómetros del brote de Tuéjar.

El alcalde del municipio, Delfín Martínez, explicó que más de la mitad de los ganaderos de Tuéjar son jóvenes, y que alguno incluso hablaba ayer de cerrar la explotación. Martínez explicó que la ganadería es una base 'muy importante' en la economía local, y adelantó que el consistorio estudia solicitar la declaración de zona catastrófica. Por su parte, el secretario general de la Unió de Llauradors, Joan Brusca, consideró 'difícil' que la peste continúe extendiéndose a otras zonas y explicó que la facilidad con la que ha salpicado los tres municipios se debe a la gran concentración de granjas, por lo que apostó por establecer ayudas a la 'desconcentración'. Brusca pidió también ayudas al ganadero y para implantar explotaciones de cerdos madre que eviten la importación y alejen el peligro de infección. Por su parte, el PSPV pidió la dimisión de la titular de Agricultura, María Ángeles Ramón-Llin y criticó que 'ha sido incapaz' de controlar la situación. El portavoz socialista de Agricultura, Antoni Lozano, además vaticinó que el brote de Tuéjar 'no será el último' porque el problema es 'el modelo de producción'. Para Esquerra Unida, el nuevo brote confirma el 'fracaso' de la inspección de la Generalitat.

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