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Trabajo, sindicatos y patronal vuelven a negociar la reforma de los convenios

Las principales divergencias se mantienen

Representantes de los agentes sociales y del Gobierno se reúnen hoy para continuar las conversaciones sobre la reforma del modelo actual de negociación colectiva, que, según el Ejecutivo, debería estar listo en septiembre para ser incluido en los Presupuestos de 2002. A la reunión, que tendrá lugar en la sede del Ministerio de Trabajo, asistirán altos cargos de este departamento y dirigentes de CC OO, UGT y la CEOE.

Hasta el momento, los representantes sindicales y de la patronal sólo están de acuerdo en la necesidad de reformar la estructura de la negociación colectiva. Pero mientras que los primeros abogan por reforzar los convenios sectoriales de ámbito estatal, los segundos quieren fortalecer los de empresa.

Esta reunión es la continuación de la que tuvo lugar el pasado 29 de mayo, cuando los máximos responsables de los sindicatos CC OO y UGT, los de la patronal CEOE y el ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, acordaron abrir un periodo de 'reflexión y consulta' antes de acometer la negociación de la reforma. A partir de ahí, los sindicatos trabajaron en la elaboración de un texto conjunto con sus pretensiones para la negociación que se dio a conocer el pasado viernes.

Comisiones Obreras y UGT defienden la necesidad de dar más eficacia a la negociación colectiva reforzando los convenios sectoriales de ámbito estatal e insisten en que cualquier modificación debe ser consensuada y acordada por las partes directamente implicadas, los agentes sociales. Denuncian que el Ejecutivo ha fijado plazos para la negociación e insta a ello, pero 'no se implica directamente en el proceso ni define con claridad y transparencia su posición, objetivos y propuestas', actitud que 'desincentiva a la CEOE'.

Por su parte, el ministro de Trabajo aseguró que el Gobierno ya ha marcado los objetivos para la mesa sobre negociación colectiva y que está dispuesto a ser flexible en los aspectos de método. Las pretensiones del Ejecutivo pasan por acabar con la actual dispersión de convenios y adecuar la regulación para delimitar la negociación colectiva, fomentar los convenios de empresa y mantener los sectoriales, y evitar que la ultraactividad beneficie a quienes no quieren negociar.

La patronal entiende que hay que reordenar la articulación de los convenios para que haya una reserva de materias en la negociación sectorial, dar más capacidad de decisión a los convenios de empresa y evitar que negarse a negociar sea un privilegio, en referencia a la ultraactividad.

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