El Gobierno ordena restaurar un área natural 'arrasada' por una constructora

La urbanización de 16 hectáreas en este área conocida como Barrikabaso, que pasó de ser no urbanizable de especial protección a urbanizable, se encuentra en los tribunales tras una denuncia interpuesta por Txipio Bai. Los terrenos son propiedad de la familia Lezama-Leguizamón, una de las más pudientes de Vizcaya, que además figura como promotora del proyecto.

Hace más de diez años, el Ayuntamiento de Barrika intentó recalificar el área para construir un total de 349 viviendas, pero el plan fue rechazado por el Gobierno. En 1997, el consistorio volvió a intentarlo con un plan menos ambicioso -97 pisos en dos parcelas separadas- y logró el visto bueno del Departamento de Medio Ambiente. El director de Ordenación del Territorio, Ignacio Izeta, aseguró hace dos años que las viviendas se construirían a 150 metros de la costa.

En los trabajos de urbanización de este proyecto, las excavadoras han actuado sin permisos sobre el área que discurre hasta la costa, junto a la playa nudista de La Cantera.

Txipio Bai denunció la pasada semana la 'desaparición de toda la cubierta vegetal' en esta zona de servidumbre de dominio público marítimo-terrestre tanto ante el Ayuntamiento como en el Gobierno.

El consistorio no ha respondido a la demanda, pero la Viceconsejería de Medio Ambiente paralizó la semana pasada los trabajos -aunque la roturación del terreno ya estaba concluida- e informó a los promotores de que este área 'forma parte de un espacio que cuenta con valores ecológicos, ambientales y paisajísticos, por lo que se propiciará su recuperación como ecosistema funcional de interés', señala el director de Recursos Ambientales, Anton Aramburu. Añade la obligatoriedad de presentar un proyecto de restauración para recuperar la vegetación 'sin perjuicio de las posibles medidas sancionadoras'.

El grupo ecologista ha anunciado además un recurso judicial en diez días por la construcción de una carretera entre las dos urbanizaciones de Barrikabaso 'que se terminó hace dos meses' cuando esta misma semana ha concluido el plazo para presentar alegaciones a esta actuación urbanística.

En 1998, el grupo ya alertó que la ubicación de las urbanizaciones en los dos extremos de Barrikabaso era una estrategia. 'Hubiera sido demasiado evidente recalificar todo el sector. El paso siguiente será unir ambos por un vial, para finalmente recalificar el resto del sector', decía su denuncia.