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GESTIÓN - 35 OBRAS DEL XVII Y EL XVIII ESTÁN EN DESPACHOS

Alcalá reclama a la Complutense el retorno del legado de Cisneros

El Ayuntamiento de Alcalá de Henares (gobernado por el PSOE e IU) demandará en los próximos días que parte del legado del cardenal Cisneros, fundador de la Universidad de Alcalá, retorne a un museo del municipio. Se trata de 35 obras de arte, custodiadas hoy por la Universidad Complutense, que se relacionan en un convenio firmado por el entonces rector de la Complutense y actual consejero de Patrimonio, Gustavo Villapalos, la Comunidad y el Ayuntamiento y la Universidad de Alcalá en 1994, que se comprometían a crear un ente que las expusiese. Hoy, la mayoría están en despachos.

El concejal de Turismo, Francisco Calles (IU), anunció ayer que enviará una carta al consejero Villapalos y al actual rector de la Complutense, Rafael Puyol, exigiéndoles que cumplan el convenio, lo que a su entender supone remitir las 35 piezas a Alcalá para su exposición en un edificio del recinto histórico complutense, declarado Patrimonio Mundial en 1998. Entre ellas destaca un retrato de Francisco Ximénez de Cisneros esculpido en alabastro policromado por Felipe Bigarny en el siglo XVI y considerado una de las obras maestras de la escultura renacentista. Hoy sólo está disponible a los ojos de los visitantes de Puyol, pues está en su despacho. Otras piezas importantes son un Calvario, pintado con óleo sobre tabla por Juan de Borgoña en 1513 y un retrato al óleo de Cisneros de Eugenio Caxés, fechado en 1604, que tiene en depósito el Ministerio de Educación. La Complutense no interpreta de igual modo la letra del acuerdo de 1994. "El único compromiso fue encontrar una fórmula legal para exponer este legado y gestionarlo conjuntamente", explicó ayer un portavoz de su rectorado. "Es cierto que se ha demorado. No tenemos especial interés en desprendernos de estas valiosas piezas, pero cuando el Ayuntamiento se dirija oficialmente a la Complutense, su solicitud será estudiada, según los términos reales del convenio", añadió.

El Ayuntamiento no es el único que reclama que las 35 obras, en su mayoría óleos de los siglos XVII y XVIII, salgan de los despachos. La Institución de Estudios Complutenses (IEC), uno de los 57 centros españoles de estudios locales asociados al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, desempolvó la petición. La IEC ha sacado el convenio de sus archivos y lo ha enviado a 170 entidades de Alcalá -grupos de concejales y la universidad, entre otros- recabando su apoyo para reclamar las piezas. Cuando reúnan los escritos se los enviarán a Villapalos y Puyol. "Están usando nuestro gentilicio a cambio de nada. Nos han engañado", manifestó su presidente, Francisco García Gutiérrez.

La Universidad de Alcalá y la Complutense tienen lazos familiares. Ambas tienen su origen en los Estudios Generales creados en 1293 por Sancho IV en Alcalá, germen de la universidad que el cardenal Francisco Ximénez de Cisneros fundó en Alcalá en 1499. En 1836 el Gobierno decidió trasladarla a Madrid, deviniendo en la Universidad Central, que en 1970, tras la entrada en vigor de la Ley de Autonomía Universitaria, paso a denominarse Complutense. En 1977 se creó la Universidad de Alcalá.

En 1993 ambas universidades festejaron el VII centenario de los Estudios Generales y surgió la discordia. El entonces alcalde, el socialista Florencio Campos, inició una cruzada para que la Complutense dejase de usar el gentilicio de Alcalá y devolviese a la ciudad el patrimonio de Cisneros. Las cuitas concluyeron cuando el pleno aprobó ceder a la universidad madrileña el uso del gentilicio, confiando en que la contrapartida fuese la devolución de parte del patrimonio.

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