_
_
_
_
_

Tres detenidos durante una manifestación antifascista en Alcorcón

F. Javier Barroso

La manifestación convocada por siete asociaciones antifascistas de Alcorcón (144.000 habitantes) acabó con carreras y porrazos de la policía. Tres jóvenes fueron detenidos por agentes antidisturbios y fueron acusados de desorden público. La marcha, a la que acudieron unos 150 jóvenes y un centenar de policías, coincidía con el quinto aniversario del homicidio del vecino de Alcorcón Ricardo Rodríguez, de 20 años, en la zona de copas Costa Polvoranca.

Ricardo Rodríguez murió tras recibir una puñalada en el corazón de José Cristóbal Castrejón, El Mallorquín, frente al bar de copas La Puta Calle. Éste cumple una condena de 23 años (18 años por el homicidio y cinco por lesiones) en la cárcel de Alcalá-Meco. También fue condenado Alberto Villar Benito, El Chema, a 18 meses por golpear a la víctima cuando estaba en el suelo. Otros cinco inculpados, que pertenecían a la banda de El Mallorquín, quedaron libres. La protesta comenzó a 12.30 en la estación de Renfe de San José de Valderas. Los 150 manifestantes se parapetaron tras una pancarta en la que se podía leer: "Abramos los ojos a tiempo. Si no queremos ser yunques, tendremos que ser martillos". Los jóvenes corearon gritos contra la violencia de corte fascista y la policía. Transcurrió sin incidentes y concluyó frente al Centro Joven, en la calle del Maestro Vitoria. Una portavoz leyó allí un comunicado en el que pedían más justicia y que los autores de violencia fascista no queden "sueltos". Tras cantar La Internacional, iniciaron el camino de regreso a la estación de Renfe, mientras coreaban consignas contra la policía.

Una veintena de agentes antidisturbios les siguió. En ese instante, un joven se subió a un respiradero de un aparcamiento subterráneo. Un policía le agarró de la camiseta y le bajó. El manifestante increpó al agente, que, sin mediar palabra, le pegó dos porrazos en las piernas y en el cuerpo.

Otros manifestantes se revolvieron y comenzaron a insultar a los policías, que respondieron con golpes. Acto seguido, un grupo de jóvenes empezó a lanzar piedras, litronas (botellas de cerveza de un litro) y pilas, entre otros objetos. Los agentes salieron tras los manifestantes. Éstos rompieron papeleras y tumbaron contenedores. Una furgoneta de la comisaría de Alcorcón acabó con los cristales rotos.

Los tres detenidos, uno de ellos de 15 años, serán acusados de desorden público. Uno de ellos, J. A. F. M., de 23 años, llevaba además un arma blanca, según fuentes policiales. El tercero, cuya identidad correponde a las iniciales a J. I. Z. M., tiene 29 años.

La madre de Ricardo Rodríguez, Isabel García, señaló la semana pasada, en una misiva registrada en el Ayuntamiento de Alcorcón que los convocantes "no han consultado con la familia para pedir opinión sobre la realización". También expresó que, si llegara a celebrarse el acto, utilizaría los medios legales y pediría responsabilidades penales "a aquellos que utilizaran" el nombre de su hijo "para hacer manifestaciones violentas".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_