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Hallado en Estepona un taller de tallado de sílex y pedernal que podría tener 60.000 años de antigüedad.

Ildefonso Navarro, un joven arqueólogo de Estepona, llegó hace sólo seis meses al Área de Patrimonio Histórico de Estepona. Allí, Ildefonso puso su experiencia al servicio de la defensa a capa y espada de los numerosos vestigios históricos de su localidad natal. Su entusiasmo está dando ya los primeros frutos. El Ayuntamiento esteponero anunció el pasado lunes la creación de un museo de arqueología, y ya se han iniciado los trabajos de restauración del Castillo San Luis, en pleno centro del municipio, para ubicarlo en su interior.Navarro, que durante mucho tiempo se ha dedicado al trabajo de campo, se enfrenta ahora al difícil reto de "compatibilizar el urbanismo con la conservación del patrimonio histórico". Asegura que ambas materias son "perfectamente compatibles, siempre que las dos partes lleguen a un acuerdo dentro de un orden". Ahora, no ha dudado en abandonar los caminos y "colgar sus vaqueros y sus botas de campo", inseparables compañeros de los últimos años.

Un ejemplo claro de que esto es posible -insiste- es el caso de la urbanización Cabo Bermejo de Estepona, donde se ha localizado un yacimiento arqueológico romano, que ha sido declarado de interés cultural por la Junta. El más interesado en su conservación ha sido la empresa promotora. En este sentido, sostiene que "el mayor daño que han sufrido algunos yacimientos ha sido debido al miedo a las paralizaciones de obra, que no tienen porque producirse si se hace una exploración del terreno por parte de arqueólogos antes de acometer las obras de cualquier promoción".

Uno de los descubrimientos más importantes de las últimas semanas ha sido precisamente consecuencia de los trabajos de prospección previos a la construcción de la autopista de peaje Estepona-Guadiaro. En su trazado, a su paso por Estepona, ha aparecido un taller de tallado al aire libre de sílex y pedernal en la zona de Arroyo Vaqueros, que según Navarro podría tener entre 40.000 y 60.000 años de antigüedad. Estas piezas líticas fueron los primeros objetos utilizados por el hombre de la prehistoria para confeccionar armas y utensilios, hoy popularmente conocidas como piedras de rayo.

Navarro tiene ya su primera teoría sobre este descubrimiento, que "podría constituir uno de los primeros yacimientos de estas características encontrados en la Costa del Sol", y no descarta que, "dada la abundancia de piezas dispersas en la superficie, se encuentre en las cercanías alguna cueva con restos de sus antiguos habitantes". De lo que no cabe duda es de que estos restos han sido una auténtica sorpresa para los expertos.

Durante los trabajos de prospección de la futura autopista se han hallado también importantes restos romanos, fenicios y medievales tanto en Estepona como en los municipios malagueños de Casares y Manilva y el gaditano de San Roque, por los que discurrirá esta vía. A ello hay que sumar la localización de cuatro cañones de hierro y un barco, también de hierro, de 30 metros de eslora, además de restos de cerámica romana en el litoral esteponero de la mano de un equipo de submarinistas del Centro de Arqueología Subacuática de la Junta.

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Para la conservación y protección de estos vestigios arqueológicos hace falta, según Navarro, "una mayor implicación por parte de los distintos ayuntamientos", y aunque echa de menos trabajar directamente en contacto con las piezas, insiste en que "ha merecido la pena dejar los trabajos de campo, y vestirse con chaqueta y corbata, porque una forma muy importante de proteger el patrimonio es trabajando desde una oficina y con ganas".

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