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Encarcelados dos jóvenes por matar a un hombre y hacer desaparecer el cuerpo La Ertzaintza investigó el caso, ocurrido en Cantabria, al hallar el coche de los detenidos

Rubén L.T. y José A.C., de 20 años, vecinos de Solares (Cantabria), ingresaron el viernes pasado en la prisión de Martutene, en San Sebastián, acusados de asesinar a un vecino de la localidad cántabra de Entrambasaguas, haber calcinado y hecho desaparecer su cadáver. La policía encontró una pistola en el domicilio de los detenidos, consumidores de pastillas y con antecedenes penales.

El delito del que Rubén L.T. y Juan A.C. están acusados fue cometido en Cantabria, pero fue la Ertzaintza la encargada de seguir las investigaciones al localizar en Bilbao el vehículo que los delincuentes supuestamente usaron para huir tras perpetrar el asesinato. Ambos han estado antes en prisión. Son consumidores habituales de drogas de diseño y cuentan con más de cien robos de coches a sus espaldas, según la información facilitada por la policía autonómica. Los dos jóvenes fueron arrestados el martes pasado gracias a una confidencia policial. Estaba a punto de cumplirse un año de los hechos que han acabado con los dos presuntos delincuentes en prisión. Después de permanecer en las dependencias de la Ertzaintza, el viernes prestaron declaración ante el juez, quien a última hora de la tarde de ese día ordenó su ingreso en Martutene tras acusarles de asesinato. Está previsto que los dos jóvenes sean trasladados a la prisión de Santoña próximamente. Rubén L. T. y Juan. A. C. comparecieron en tres ocasiones por separado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao. Sólo uno de los dos presuntos asesinos reconoció ante el juez la autoría, junto a su compañero, del crimen. El otro detenido se negó a prestar declaración. El juez decidió someter a ambos a un careo. Los hechos de los que se responsabiliza a Rubén L.T. y Juan A.C. se remontan al 28 de octubre del año pasado. Los dos jóvenes se encontraban en Entrambasaguas (Cantabria). Obligaron a parar el vehículo de un vecino de la zona, de 50 años, con intención de robarle. Una vez en el interior del automóvil, amenazaron al propietario, quien se resistió, ante lo cual, los jóvenes le propinaron una paliza. Mientras uno de ellos le golpegaba con un objeto en la cabeza, el otro le clavó reiteradamente un destornillador en partes vitales del cuerpo, provocándole la muerte. Posteriormente, le llevaron a una escombrera y allí le prendieron fuego, según reconoció detalladamente uno de los dos acusados ante el juez. Después, los dos imputados sustrajeron la cartera del fallecido, que contenía unas 70.000 pesetas, y se dirigieron en el coche a un club de alterne de Bilbao. De acuerdo con el testimonio del que confesó, cuando salieron del lugar comprobaron que la grúa se había llevado el coche. La investigación comenzó cuando se conoció la existencia de una denuncia por la desaparición de vecino de Cantabria y se cotejaron sus huellas con las encontradas en el coche. Los restos del cadáver no han sido todavía hallados. La Ertzainta prosigue la investigación, que permanece bajo secreto sumarial.

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