Atutxa estima que el conflicto por la contravigilancia policial a concejales del PP está "en vías de solución"

El consejero vasco de Interior, Juan María Atutxa, explicará hoy en la habitual reunión semanal del Consejo de Gobierno los avances logrados con el Ministerio del Interior para intentar "apagar" el conflicto surgido entre ambas Administraciones por las contravigilancias a los cargos electos del PP en Euskadi. Atutxa considera que, el conflicto "está en vías de solución" y que quedará definitivamente resuelto en los próximos días a través de reuniones de nivel técnico.Atutxa informará hoy de sus gestiones al lehendakari José Antonio Ardanza y el resto de su Gabinete, en cumplimiento del compromiso adquirido hace una semana. Entonces, se rechazó cualquier posibilidad de plantear un conflicto institucional y, pese a que el consejero de Interior cree que el Cuerpo Nacional de Policía ha "invadido" las competencias de la Ertzaintza, el Ejecutivo vasco decidió "agotar las vías de diálogo" con el ministerio, siguiendo así la propuesta de Atutxa.

Durante los últimos siete días, Atutxa, y el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, han mantenido varios contactos telefónicos, mientras que el pasado viernes se reunieron en Madrid el secretario de Estado para la Seguridad, Ricardo Martí Fluxá y el viceconsejero vasco de Seguridad, José Manuel Martiarena. En este encuentro, ambas partes decidieron "abrir nuevos canales de diálogo" en tomo a la protección de concejales y otros cargos del PP en Euskadi, y se apuntó a la existencia de "avances".

La situación está "más calmada" y hay "un acuerdo en proceso", que previsiblemente se ultimará mediante futuras reuniones entre técnicos del ministerio y de la consejería, para "poner orden" en estos dispositivos de protección, según fuentes de la Ertzaintza.

La Administración vasca mantiene la esperanza de que el Ministerio del Interior acepte que fue un error establecer una operación de contravigilancias del Cuerpo Nacional de Policía a concejales y cargos públicos del PP sin informar a la policía autónoma vasca, ya que eso entraña riesgos para ambos cuerpos.

La semana pasada, por ejemplo, estuvo a punto de producirse un nuevo incidente, sobre el que ninguna de las dos partes ha querido informar, cuando un ertzaina acudió a recoger al concejal del PP al que escolta y descubrió en las inmediaciones a cuatro agentes camuflados del Cuerpo Nacional de Policía.

El ministro del Interior, por su parte, avanzó ayer un informe sobre la política antiterrorista del Gobierno a los miembros del Comité Ejecutivo Nacional del PP. Este órgano refrendó sus actuaciones y, por tanto, éstas no van a variar, según el coordinador general del partido, Ángel Acebes. Es decir, la cuenta abierta para sufragar el gasto de escoltas privados sigue abierta y las contravigilancias de los policías nacionales continuarán.

Mayor Oreja recalcó ante la dirección del PP que el objetivo de ETA "es hacer imposible la política del Gobierno" y remarcó que su estado actual, tras pasar en los últimos 20 años por diversas fases, es "de clara degeneración, con una pérdida cada vez mayor del respaldo social y con unas prácticas cada vez más mafiosas y brutales".

El PP considera que la sociedad "es cada vez más fuerte" y reclama unidad de los demás partidos democráticos para acabar con las divergencias sobre los asuntos antiterroristas.