Cuatro opositores a policía usaron radiotransmisores para copiar en el examen

Cuatro aspirantes a policía municipal, que ayer se disputaban 150 plazas junto a otras 1.360 personas, fueron sorprendidos por el tribunal mientras copiaban con un radiotransmisor aplicado a la oreja. La policía localizó en el exterior del edificio a dos compinches soplando las respuestas. Además de estos cuatro infractores, los examinadores descubrieron a otros 20 que se conformaron con el método de la chuleta. Todos fueron expulsados. Es la primera vez que el procedimiento de los walkie-talkie, común en la universidad, se descubre en el Ayuntamiento, según un miembro del tribunal.

Para localizar a estos cuatro aspirantes a agentes de la ley y a la vez tecnoadictos de la copia, necesitó la colaboración de la policía Nacional y Municipal. Dos coches patrulla de estos cuerpos sorprendieron en los alrededores de un pabellón de la casa de Campo donde se celebró el examen a los aliados de los infractores, micrófono en mano, dictando las respuestas. Éstas versaban sobre dos cuestiones: "Organización de la Policía Municipal" y "Multas municipales". Posteriormente, los agentes acudieron a la sala de la oposición y alertaron al tribunal. Este ya andaba con la mosca tras la oreja. De hecho, ya había localizado a dos examinandos que, precisamente en la oreja, escondían un receptor diminuto.

Receptor inalámbrico

Los examinadores tardaron poco en localizar a los otros dos. Tres de estos infractores utilizaban un pequeño artefacto que, por un cable, se unía a un radio transmisor escondido en la ropa. El cuarto, aún más moderno, usaba un receptor inalámbrico del tamaño de una lenteja. Todos fueron expulsados automáticamente, aunque, eso sí, se les permitió abandonar la sala con su artilugio.En este último examen para convertirse en policía municipal -los aspirantes ya han pasado pruebas físicas y psicotécnicas- también se presentaron aspirantes con chuletas. El tribunal localizó a 20. Claro que eso de las chuletas hechas a mano ha pasado, a juicio de Víctor Jimeno, uno de los 15 miembro del tribunal, a la historia. "Las chuletas, la mayoría, estaban hechas con ordenador y eran realmente buenas", añadió este examinador.

¿Cómo se localiza a un tipo que copia con un radiotransmisor en la oreja? Es más sencillo de lo que parece, según este miembro del tribunal: "Hombre, se ve a alguien con la mano todo el tiempo en la oreja. Ese es el ejemplo número uno". El sospechoso número dos es el del que no se quita el abrigo ni siquiera cuando en la sala reina un calor tropical.

"A pesar de la calefacción, había uno con una chamarra para que nadie descubriera el walkietalkie", explica el examinador, que concluye que lo de las chuletas es más familiar: "Todos hemos copiado alguna vez en la universidad, así que es más sencillo pillarles".

Los infractores abandonaron la sala, perdiendo todos. los derechos del examen, sin oponer resistencia. Casi sin inmutarse. Como quien apuesta todo a un mismo número, pierde y no le afecta.