_
_
_
_
_

Mujeres brigadistas en el centenario de 'Pasionaria'

La Fundación Dolores Ibárruri inicia hoy unas jornadas bajo el lema Las mujeres y la solidaridad, enmarcadas en los actos que se desarrollarán con motivo del centenario de Pasionaria. En el acto de presentación estuvieron tres de las ponentes: Irene Falcón; de 87 años, directora de la Fundación y compañera incondicional de Dolores Ibárruri; Lise Ricoll, de 80 años, activista francesa de las Brigadas Internacionales que fue condenada a muerte en su país durante la ocupación hitleriana, y Lola Zhan, brigadista alemana, de 85 años.En estas jornadas se estudiará hoy la participación de, las mujeres en la resistencia antifranquista y, en la clausura de mañana, el papel actual de las mujeres en las zonas de conflicto (Haití y el Mediterráneo). Un pasado que "a nosotras nos parece muy próximo", comentó Lise Ricoll, pero cuyo recuerdo "debe servir para frenar cualquier asomo de fascismo y para construir un presente y un futuro más solidario".

Lise contó su experiencia personal en la secretaría técnica de las Brigadas Internacionales en Albacete durante la Guerra Civil, después de trabajar desde Francia en el movimiento de ayuda para España: "El Ejército español estaba entonces desnudo", dice. "El apoyo material no era suficiente".

Las fotos que aparecían en la prensa y los noticiarios del cine, en los que se veía a "mujeres ataviadas con monos y luchando con un fusil a cuestas junto a sus padres y hermanos", empezaron a gestar, poco a poco., "partiendo de la espontaneidad de la masa", esa idea de unas Brigadas que lucharían en el seno del Ejército español como miembros de la armada republicana. Los milicianos acudían a su secretaría para que reclutara jóvenes que conocieran el manejo de las armas "porque no nos basta con el coraje de nuestro pueblo", le comentaban aquellos hombres, voluntarios, "decididos a dar hasta la última gota de su sangre por el antifascismo".

Lola Zhan, que sólo habla alemán, recordó emotivamente el día que conoció a Pasionaria: "Vi a una mujer vestida de negro que hablaba de la, lucha de los mineros asturianos", dice, "y aunque yo no entendía nada, sentía que su mensaje me llegaba al corazón".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_