_
_
_
_
BALONCESTO LIGA A.C.B.

El Madrid se agarra a Sabonís

Un débil Pamesa se estrella ante el muro lituano

Resucitó el Madrid de las peores ocasiones. Tras su agónico triunfo en el derby ante el Estudiantes, los blancos comparecieron 48 horas después en idéntico escenario pero con distinta cara. La de ayer fue la de un equipo cansado, con las reservas físicas y psicológicas a punto de extinguirse. De ello intentó aprovecharse un Pamesa muy necesitado de puntos y que ya había vencido en Valencia.No tuvo que esforzarse al máximo la escuadra de Herb Brown para llevar la iniciativa en una primera parte en la que el Madrid aplicó a su juego un ritmo de media intensidad. Ni siquiera fue suya la lucha debajo de los tableros, su punto fuerte. La calidad de Grant y Kidd y el ardor de Rodríguez decantaban la balanza del lado valenciano.

Más información
Por fin, Liga la española
El Taugrés desfigura al líder

El Pamesa superaba al Madrid en el rebote (19-13) en la primera parte y contaba, además, con la aportación de un buen jugador de perímetro como es Mason. Era suficiente para abrir hueco en el marcador (17-27) en el minuto 12, aunque las propias limitaciones de los levantinos impedían un definitivo distanciamiento. Al Real le salvaban las ganas de Henry -único tirador blanco con el punto de mira ajustado- y los consabidos Arlauckas y Sabonis.

El problema para Obradovic radicaba en la necesidad de dosificar a sus dos estrellas. Así, Sabonis se pasó casi la mitad de la primera parte en el banco y Arlauckas le imitó en la segunda. En el descanso el Pamesa, relajado sin la presencia del pívot lituano, todavía mantenía la delantera (36-43), pero sus síntomas de flaqueza comenzaban.

Sabonis emergió poderoso en los primeros minutos de la segunda parte y dio el golpe de timón que precisaba su grupo. Se erigió en el absoluto dueño del juego interior, cerrando los caminos a Kidd y Grant e insuflando a sus compañeros el ánimo que les faltaba. A partir de Sabonis creció el Real Madrid, que limaba la desventaja de forma pausada pero segura (42-45, m. 22; 48-48, m. 26; 53-50, m.28). Sólo bastó que, por momentos, los de Obradovic exhibieran su firmeza defensiva para acabar de derrumbar oposición del Pamesa, aunque aún dio sus coletazos.

Pero el Madrid recuperó aun acertado Henry -estuvo muchos minutos sentado- y, sobre todo, siguió con Sabonis. Sus números en la segunda mitad reflejaron lo que fue el partido: 14 puntos, nueve rebotes, dos asistencias y algo que no se mide en dígitos, su aterradora presencia. Ante Sabonis, el Pamesa no encontró nada que oponer.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_