_
_
_
_
_

El PP rechazará la "mano tendida" de González si no se compromete a anticipar las elecciones

El Partido Popular ve en la "mano tendida" por Felipe González un brindis al sol. Más que una auténtica oferta de negociación y acuerdo para impulsar la recuperación económica y retomar en el Parlamento las riendas de la vida política, los populares creen que se trata de un mero gesto, que además tildan de prepotente. Para los hombres de máxima confianza de Aznar, como Francisco Álvarez Cascos, secretario general del PP, el diálogo ofrecido por González sólo tiene sentido si sirve para desencadenar la convocatoria de elecciones legislativas. Por tanto, un diálogo improbable.

Más información
La "solución menos mala" para los socialistas
El jefe del Gobierno quiere un pacto para ir conjurar el riesgo de 'italianizacion'

Los populares creen que provocaría confusión en la opinión publica aceptar una negociación con el Gobierno que soslayara lo que ya una mayoría de ciudadanos (53%) solicita en el sondeo de Demoscopia publicado ayer por este diario: disolución del Parlamento y convocatoria de elecciones. A esa constatación, que respalda la petición que el pasado lunes hizo el comité ejecutivo nacional del PP, Álvarez Cascos agregó ayer un sarcasmo: "Hay quien pretende ofrecerse como socorrista cuando él es el náufrago".A juicio de este dirigente popular, la "mano tendida" por Felipe González en el mitin que protagonizó en Mislata (Valencia) el viernes es "un gesto cargado de hipocresía, que demuestra que Felipe González sufre una borrachera de soberbia y necesita una cura de humildad".

El llamamiento al diálogo por parte de González llegó a los Populares en la noche del viernes a través de los medios de comunicación, sin que previamente hubieran recibido en privado un aviso fundado y directo de que el Gobierno quería negociar.

Los dirigentes del PP invocan la oferta que hicieron ellos al Gobierno el pasado mes de septiembre para pactar los Presupuestos Generales del Estado, entonces en gestación en el Congreso. Pero en aquella ocasión, el PP tampoco precedió tal invitación de ninguna conversación previa con los socialistas que diera a su oferta más valor que el de un solemne ofrecimiento.

Las dificultades que muestra la economía española al crecer por debajo de la de otros países europeos y no lograr una reducción sustancial del déficit, a juicio del PP, es ajena a la crisis política derivada del caso GAL. Esas dificultades arrancan, para los populares, de que el Gobierno no acomete las reformas que debiera.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Rodrigo Rato, invocó ayer que "desde el pasado mes de abril, los mercados internacionales consideran que la nuestra es una economía con riesgos". Rato alberga incluso ciertas dudas sobre los últimos datos que, acreditan una creación de empleo neto, después de que en víspera de las elecciones de 1993 el Gobierno mostrara una favorable evolución del desempleo que quedó contradicha tras los comicios.

Para este dirigente popular, de total confianza de Aznar, el Gobierno tiene oportunidad de mostrar su voluntad de acuerdo en la Ley del Suelo, "donde puede dejar constancia de si quiere liberalización o intervencionismo".

En cuanto a la crisis política, Rodrigo Rato expresó ayer gráficamente, parafraseando a Gustavo Adolfo Bécquer, lo primero que le tendría que decir a Felipe González si hablara con él: "Crisis política eres tú".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_