_
_
_
_
_
GENTE

Märtha Louise,

princesa de Noruega, no tendrá que pasar por el incómodo trance de ser públicamente acusada ante un tribunal, por la mujer de Philip Morris, de "haber seducido a su marido", en el juicio de divorcio que tendrá lugar próximamente en Londres. El rey Harald, padre de la princesa, ha decidido que ésta se acoja a la inmunidad real que le concede el derecho a rehusar comparecer en un juicio civil y no se presentará a declarar ante ningún tribunal, ya sea en Noruega como en el Reino Unido. El departamento Jurídico del Ministerio de Asuntos Exteriores con el asesoramiento de reputados especialistas en Derecho, estudió el caso tras haberse recibido en el Palacio Real una citación a la princesa para presentarse ante un tribunal a solicitud de Irene Morris, quien pidió el divorcio de su marido Philip aduciendo que le había sido infiel al mantener una aventura amorosa con la princesa, de la que era profesor de equitación. El asunto saltó a la opinión pública hace 10 días y desde entonces ha sido el plato fuerte de la prensa noruega y de la británica, proclive a explotar este tipo de informaciones. La princesa ha guardado silencio.-

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_