_
_
_
_
_
GENTE

Carlos Jacob

Un juez forofo de la selección nacional

Carlos Jacob Sánchez está decidido a que el fútbol en España no se convierta en un patio de vecindad lleno de insultos. Nombrado juez único del Comité de Competición hace un par de meses, la tranquilidad se le ha terminado. Este abogado de 34 años se ha convertido de repente en la estrella del fútbol, no por sus habilidades con el balón, sino por la decisión tomada anteayer de expedientar al presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil y Gil, y a su entrenador, Javier Clemente, cuyas duras críticas han salpicado prácticamente a todos los sectores del fútbol. Es un juez de peso -120 kilos- y madrileño. "Soy madrileño, pero no madridista", se preocupa de aclarar. "Nunca he sido socio de un club. Mis amigos son del Madrid, y mi padre, del Atlético, por lo que le he visto sufrir mucho, pero yo soy sólo forofo de la selección nacional".A Carlos Jacob, que por su cargo puede entrar libremente en el palco presidencial de cual quier campo de fútbol, le gusta el fútbol, pero ahora ya no asiste a los partidos. "Me produce cierto rechazo, porque ahora me fijo sobre todo en su aspecto jurídico", confiesa. Le aterran los campos de las categorías inferiores: Segunda B y Tercera División, porque "hay auténticas palizas a los árbitros".

En su cargo actual, dice que de momento no ha tenido ningún tipo de presión. Asegura carecer de todo ánimo de notoriedad y desempeña este cargo "por tratar el derecho desde el punto de vista del juez, tan distinto al del abogado".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_