El dólar sigue su depreciación frente a las monedas de los principales paises industrializados
La cotización del dólar frente al resto de las divisas de los países industrializados siguió depreciándose ayer en los principales mercados de cambios en lo que se anuncia como una semana intranquila, que podría culminar en un nuevo reajuste de las paridades internas de las monedas que forman parte del Sistema Monetario Europeo. El marco alemán mantuvo su tendencia a la revalorización, siendo acompañado por la peseta en este viaje, mientras que el franco francés se benefició del hecho de ser fiesta en el país vecino.
El anuncio de que Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, viajaba hoy a la República, federal de Alemania para entrevistarse con el gobernador del Lundesbank, banco central alemán, volvió a levantar todos los temores de una nueva reordenación de los tipos de cambio de las principales divisas de los países industrializados. El dólar cambió ayer un yen por debajo del último día en el mercado de Tokio, y fijó su cambio frente al marco a 1,7200 frente a 1,'7265 marcos del pasado viernes.La peseta continúa con su tendencia a mantener el tipo de cambio frente al marco alemán, por lo que también se apreció frente al dólar prácticamente en la misma proporción en que lo hizo la divisa alemana. El dólar cambió ayer en Madrid a 114,812, 1,297. menos que el pasado viernes. El Banco de España no intervino en el mercado de cambios.
Las tensiones que la depreciación del dólar están provocando sobre el resto de las monedas quedaron atenuadas ayer por el hecho de que en Francia era día festivo y por lo tanto no hubo mercados. Pero la mayor parte de los expertos consideran que esta semana será clave para intentar prever que pasará en las próximas. La visita del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos a Alemania, sólo se puede interpretar como el intento de llegar a un nuevo acuerdo sobre cotización del dólar frente al marco, lo que arrastraría a un nuevo rejuste monetario.
Nuevo reajuste
Si las cosas no variaran, cualquier modificación de la paridad dólar-marco debería llevar consigo una modificación igual sobre el resto de las monedas del SME. Pero los socios europeos no están dispuestos a aceptar esta revaluación. De hecho, ni los especuladores lo están y ahí han surgido las tensiones sobre el franco.Cualquier apreciación del marco frente al dólar exigiría, en distinta proporción, una apreciación de la moneda alemana frente a una parte de las divisas que forman el SME y de algunas otras, como la peseta o la libra esterlina, que no están dentro. Los socios europeos exigirían una apreciación similar del marco frente a sus respectivas divisas y los ministros de Finanzas de la CE tendrían que acabar poniéndose de acuerdo de hasta dónde llegaban. La peseta no forma parte del SME, y dada la actual situación de balanza de pagos, se vería impulsada a revaluarse en parte, frente a las monedas europeas. En definitiva, a hacer algo de lo que las autoridades económicas vienen realizando desde hace dos semanas.
