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Gil, Menotti y Luis piden calma para superar la crisis azulgrana

La zona de vestuarios del Camp Nou albergó anoche a unos personajes heterogéneos. El árbitro Ramos Marco paseó su malhumor por las condiciones de reanudación del partido; Luis Aragonés dijo que los suyos habían sido "infantiles" en el gol; César Luis Menotti pidió que el público de Cataluña animase al Barça; Jesús Gil solicitó "calma y serenidad" a los azulgrana; los jugadores del Barça pasearon su malhumor contra el árbitro, y Josep Lluis Núñez no dijo nada.El enfado de Ramos Marco estaba provocado por una circular de la federación en la que se le obligaba a reanudar el encuentro con un bote neutral. Ramos Marco consideraba que debía reanudarse con la falta a favor del Atlético que él señaló antes de suspender el partido el pasado 3 de octubre: "No estoy de acuerdo con la circular", dijo Ramos Marco en tono muy malhumorado. "¿Qué habría pasado si yo hubiese señalado un penalti antes de suspender el encuentro? Pero donde manda patrón, no manda marinero". El vicepresidente azulgrana Joan Gaspart se acercó a Ramos Marco y le pidió una copia de la circular: "¿Qué pasa?", respondió el árbitro en un tono muy seco: "¿Acaso no la han recibido ustedes?".

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Luego, tras el gol, la expulsión, y la cuarta tarjeta de Schuster -todo en 20 minutos-, Ramos Marco parecía haber trasladado el malhumor a los jugadores del Barga. "He de denunciar al árbitro", dijo el capitán Alexanco. "No sé en qué plan ha venido. Parece que no le haya sentado nada bien volver a Barcelona. Landáburu ha lanzado fuera una falta directa en la que no había pedido barrera, y él ha obligado a repetirla. Hemos protestado y nos ha dicho: "Pues si llega a entrar, doy gol". Por su parte, Ramos Marco, desmintió las palabras del capitán azulgrana y le calificó de "mentiroso".

Los máximos representantes del Atlético parecían más preocupados por la derrota del Barga que por su victoria. El presidente, Jesús Gil, dijo: "Hemos tenido más suerte en unos 20 minutos que eran a cara o cruz. Pero esta alegría no me satisface, porque hundir al Barça no me agrada". Y afiadió: "El Barça es mucho Barça, y debe salir adelante". Gil no quiso pronunciarse sobre la posibilidad de que el argelino Madjer, del Oporto, fiche próximamente por el Atlético.

César Luis Menotti, el entrenador del Atlético, fue aún más lejos: "A un equipo en tensión es necesario que el público le ayude a salir de la crisis. Cataluña debe apoyar al Barça. Ha sido una victoria justa, porque en 20 minutos hemos hecho lo que correspondía. Nosotros afrontamos el partido con la tranquilidad que nos da ser segundos, y eso se ha notado".

Luis Aragonés, técnico del Barcelona, realizó una concreta autocrítica: "No hemos sabido apretar el ritmo. No hemos marcado bien en zonas, y, sobre todo, la defensa ha sido infantil en el gol. Se lo hemos regalado. Aunque fuese fuera de juego, no podemos dejar que marque, porque siempre es posible que el árbitro no lo señale". Luis prometió "tomar medidas", pero añadió: "En un mes y 10 días es muy dificil cambiar las costumbres de un equipo. Me gusta el reto, y cuanto más difícil es una situación, más me gusta. Pero déjennos trabajar un poco".

Josep Lluís Núñez, el presidente del Barca, contempló con gran nerviosismo los 20 minutos. Pero en cuanto se consumé la derrota, Núñez abandonó el palco y se fue sin realizar declaraciones.

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