Mantener la identidad de la SER, condición exigida por Antonio Garrigues para asumir la presidencia
Antonio Garrigues y Díaz-Cañabate, embajador de España y ex ministro de Justicia, ha accedido a permanecer en la presidencia del consejo de administración de la Sociedad Española de Radiodifusión (SER) después de los recientes cambios en la composición del accionariado, mediante los cuales PRISA (sociedad editora de EL PAIS) se ha hecho con el control de la compañía. Garrigues explica así su decisión.Pregunta. ¿Cuál es su posición actual como presidente de la SER en esta nueva etapa?
Respuesta. Mi posición frente a la nueva distribución del accionariado no hace más que confirmar lo que ha sido mi actitud y conducta permanente durante los largos años de mi presidencia. La Sociedad Española de Radiodifusión no ha sido nunca el feudo de ningún grupo de accionistas, sea cualquiera la composición del capital.
Independencia
P. ¿Cómo entiende usted entonces la independencia de la SER?R. La SER se ha convertido, por la labor colectiva de todos los que han participado y participan en ella, por la independencia que ha mantenido siempre, por su objetividad en la información, por su rechazo de todo protagonismo personal, por su preocupación por mantener un nivel moral en sus programas, por la amplitud y la fidelidad de su audiencia, en una especie de patrimonio de la sociedad española. Y esto es algo que debe respetar siempre el accionariado de la SER.
P. ¿Ha puesto alguna condición para seguir siendo presidente de la red de emisoras?
R. En el respeto a ese status consiste la condición sine qua non que he puesto para continuar ,como presidente al frente de la empresa. Esta condición ha sido aceptada por el presidente de PRISA sin la menor dificultad ni reserva, porque coincide completamente con el interés que ha movido a la sociedad PRISA para tomar la posición que ha tomado en la capital social de la SER. En virtud de este pacto la sociedad no sólo se ha reafirmado en su identidad, sino que se ha consolidado y preparado para robustecer y perfeccionar su estructura interna y ponerse en condiciones de afrontar con éxito los nuevos retos y las nuevas metas a las que parece estar llamada en la coyuntura histórica española actual.
