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Manute: "Más alto era mi bisabuelo"

Manute Bol no entiende nada de lo que sucede a su alrededor. Desde que llegó a la universidad de Bridgeport es el centro de todos los comentarios. Este hombre extremadamente delgado se ha convertido en el hombre más alto en la historia del baloncesto universitario de Estados Unidos. De estas cosas Bol se va enterando poco a poco, así como los norteamericanos de las costumbres de este negro procedente de Sudán, que tenía un bisabuelo más alto.

Manute Bol intuye que la expectación debe ser porque mide 2,29 centímetros, es decir, que es un gigante dentro de un deporte de gigantes. Bol puede colgarse de la cesta (305 centímetros) sin ni siquiera ponerse de puntillas. Bol, con los 183 centímetros de envergadura de sus brazos también puede tocar los dos lados del tablero simultáneamente. Ambas hazañas eran impensables hasta la llegada de Manute Bol.El delgadísimo sudanés (Sólo pesa 86 kilogramos) parece un poco sorprendido con su popularidad. Al fin y al cabo, él es un dinka, un miembro de la tribu dinka, nacido en Gorgrial, no se sabe, bien cuándo. Y en términos dinkas, no es particularmente alto. "Mi madre medía 208 centímetros", se justifica sonriendo Bol, "y mi padre y mi hermana, 203; y mi bisabuelo aún era más alto, medía 239 centímetros".

El entrenador de Manute Bol, Bruce Webster, explica su hallazgo: "Cuando encontramos a Manute en el aeropuerto de La Guardia, no podía creerlo. Era tan delgado que aún parecía más alto. Cuando salimos del aeropuerto, el taxista estaba tan sorprendido que se subió a la acera".

Aparte de la temperatura, Bol sólo se queja de la comida y del café de la universidad. La mayor parte del tiempo lo gasta en una pizzería, comiendo espaguetis, su plato favorito en Sudán. Su entrenador piensa que esto no es comer. Así que le ha puesto dieta diaria de 5.000 calorías, "pero Manute aún no ha ganado peso", añade Webster.Para Manute era mas fácil ingerir espaguetis que masticar pollo. El gigante sudanés llegó a Bridgeport con 12 dientes menos, se puso en manos de odontólogos y con dos puentes se solucionó el primer problema. Manute explicó que seis de los dientes que le faltan se los extrajeron en un ritual dinka y que los otros los perdió la primera vez que intentó meter una canasta con las dos manos. Se golpeó la boca con el aro.

Bol no es un mal jugador. Con el Bridgeport ha ganado 17 de los 21 partidos jugados esta temporada con una media de 21,5 puntos por partido. El sudanés sorprende por blocar balones difíciles y a continuación hacer canasta en smash.

El público agota las localidades para verle. "Mientras la gente sea agradable conmigo y no se interfiera en mis estudios, no me preocupa", señaló Manute Bol en su esquemático inglés.

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