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Existe en España una insensibilidad notable frente a las nuevas tecnologias, según Antonio López, ex director de TVE

"La situación actual en España es de una insensibilidad notable frente a la posible puesta en marcha de las nuevas teconologías", manifestó Antonio López, ex director de TVE y presidente de Amper, en su ponencia pronunciada ayer en el simposio organizado por la Asociación Cultural para la Investigación Aplicada en Comunicación (AIC). Destacó, sin embargo, la labor que está desarrollando el Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicationes, en la futura regulación de las telecomunicaciones.El ex director de TVE planteó una serie de reflexiones sobre las nuevas tecnologías al tiempo que explicó sus características y soportes tecnológicos. "La televisión directa vía satélite resuelve muchas de las sombras técnicas aunque crea otras sombras político-jurídico-administrativas". Los proyectos españoles del satélite y cable parece que "están estancados".

Existen dificultades, especialmente financieras, en otros países como Gran Bretaña y Francia, que tenían previsto lanzar sus primeros satélites en 1985 y 1986 y que, muy probablemente, serán retrasados.

"En el proceso de aplicación de las nuevas tecnologías", expuso Lopez, "se sigue un sentido que pasa en primer lugar por la aplicación del nuevo soporte al medio de que se trate; en segundo lugar, por la búsqueda del servicio a prestar y, en tercero, por el hallazgo de los elementos de financiación que hacen posible el servicio. El proceso que pudiera en principio parecer lógico, no lo es tanto si se le aplican los cánones convencionales".

"En términos rigurosos", dijo López, "no puede hablarse más que de nuevas aplicaciones más o menos distanciadas del punto inicial. Es decir, una vez puestos satélites en órbita con propósitos militares o científicos, surge la posibilidad de su aplicación a otros campos y empiezan a utilizarse satélites de comunicaciones, y posteriormente de radiodifusión directa. ¿Atienden éstos realmente una necesidad? ¿Son insuficientes las redes actuales como soporte de programación y se hace necesaria la ampliación de los mismos? La respuesta a estas preguntas es dudosa cuando no claramente negativa".

Se refirió asimismo a los factores que no se han tenido en cuenta, como el "desplazamiento de la financiación hacia el usuario". Informó que, en el caso de España, el coste adicional por receptor de televisión, para poder recibir las emisiones por satélite, ascendería aproximadamente a 100.000 pesetas. Puesto que existe un parque de diez millones de receptores, la repercusión de la televisión directa por satélite en nuestro mercado alcanzaría el billón de pesetas. -

Por otra parte, "la demanda de programas va a sufrir un incremento tan brutal en los próximos años como consecuencia de la introducción de las nuevas tecnologías que sólo los paises industrialmente preparados en producción podrán atender seriamente su demanda interna y los riesgos de colonización de alto contenido ideológico van a agudizarse sensiblemente"

Entre las últimas reflexiones que planteó al auditorio, señaló Antonio López que hay que preguntarse y responder a numerosos interrogantes político-económicos sobre el incremento de la oferta televisiva.

Antonio Martínez Ovejero, miembro de la ejecutiva de UGT y asesor ejecutivo del ministro de Transportes, destacó la urgencia de crear un nuevo marco jurídico para las telecomunicaciones que subsane los vacíos y fragmentación legales así como la conveniencia de crear, como sucede ya en otros países de nuestra área, una red integrada para todos los servicios de telecomunicación. Bernardo Díaz Nosty hizo hincapié en que los gobiernos deben "reconducir el desarrollo tecnológico hacia la satisfacción de las demandas sociales".

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