Tres atracadores lograron romper el cerco policial escudándose en dos rehenes
Tres hombres consiguieron escapar de un cerco policial y huir, ayer por la mañana, tras perpetrar un atraco en la sucursal de Induban situada en la calle Ramón Sáinz, 38, de Madrid, cerca de la plaza de toros de Vista Alegre. Los asaltantes lograron abandonar la sucursal escudándose en dos personas que tomaron como rehenes, a las que amenazaron de muerte, según la información facilitada por la Jefatura Superior de Policía. A última hora de la tarde se desconocía la cantidad de dinero sustraída por los atracadores.Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 10 de la mañana. Los tres hombres penetraron en la sucursal bancaria, armados de una pistola y una escopeta de cañones recortados. Al apercibirse de sus intenciones, los empleados de la entidad hicieron sonar la alarma. Inmediatamente, cuando aún no habían tenido tiempo de huir, varios coches de la Policía Nacional llegaron a las inmediaciones y cerraron la salida.
Los tres atracadores aparecieron en la calle protegiéndose con los cuerpos de dos personas, a quienes habían reducido al apuntarles con las armas a la cabeza, y anunciaron que les matarían al menor intento de la policía para detenerles.
Parapetados en los rehenes, los delincuentes llegaron hasta un Simca 1000, color oro, matrícula de Madrid M-0467-CX, en el que lograron huir a gran velocidad después de haber abandonado a los rehenes. Él vehículo fue encontrado poco después en la calle Sociedad, en Carabanchel Alto, sin rastro ya de sus ocupantes.
