Duras críticas de los dirigentes empresariales de la CEOE a Calvo Sotelo y a UCD
"Concederemos cien días de gracia al próximo Gobierno que salga de las urnas, sea cual sea, y aún más, porque lo van a necesitar" dijo Carlos Ferrer Salat, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en una conferencia de Prensa dada ayer junto al presidente de la patronal madrileña, José Antonio Segurado, y al secretario general de la cúpula patronal, José María Cuevas. Ferrer declaró rotundamente que la campaña de los empresarios tiene un primer fin: la defensa a ultranza de la democracia.El presidente de la CEOE, que asistió ayer a una reunión del comité ejecutivo de la Confederación Empresarial Independiente de Madirid,(CEIM), comentó las re cientes" declaraciones del presidente de Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, en las que afirmaba que la postura de la CEOE había allanado un triunfo socialista, explicando que "Calvo Sotelo ha destacado siempre por su ingenio, y ahora lo ha vuelto a demostrar. Sus palabras no reflejan la realidad. Si Calvo Sotelo cree que ha habido disminución del entusiasmo de los empresarios hacia UCD, la culpa es de su partido, no de los empresarios". Segurado matizó la respuesta afirmando que "UCD ha sido un partido que se ha disgregado en cinco y que ha te nido un proceso de desafiliación importante, al revés que la CEOE. Calvo Sotelo debería apoyar al presidente de su partido, Landelino Lavilla, y no quitarle protagonismo aceptando el debate con Felipe González sin ponerlo antes en su conocimiento".
José María Cuevas denunció una operación de "liquidación y almoneda del patrimonio sindical" por parte del Ministerio de Trabajo, que "en los últimos días ha entregado cincuenta o sesenta locales a CC OO y UGT, sin respetar siquiera el compromiso secreto que firmaron sindicatos y Gobierno cuando la firma del ANE".
Tampoco el PSOE se libró de las duras críticas de la cúpula patronal. Segurado reiteró que CEIM había avisado con tiempo de los peligros que trae el programa socialista, y Ferrer apostilló, "evitando enfocar el tema ideológicamente, que el programa del PSOE no sirve para salir de la crisis, porque en general hace a las empresas menos competitivas".
El patrón de patronos volvió sobre el PSOE afirmando que "pretende sindicalizar la vida del país, llevándonos en definitiva a la vuelta al sindicato vertical". Respecto a la coparticipación defendida por el PSOE, Ferrer comentó que se trata "no de que los trabajadores participen en la empresa, sino de que participen los sindicatos, esto es, sólo quienes representan al 10% de los trabajadores".
Roca: pequeñas reformas
Por su parte, Roca Junyent, candidato número uno en Barcelona al Congreso por Convergencia i Un¡¿), se reunía también ayer en Madrid con más de cincuenta socios del Círculo de Empresarios para someterse a sus preguntas. Roca dijo a los empresarios que "les encontraba muy derrotados" respecto al resultado de las elecciones y que "todavía había mucha cancha que jugar". Santiago Foncillas, presidente del Círculo, coincidió con el catalán afirmando que "la suerte no está echada todavía. Sumando las fuerzas de los partidos responsables se puede evitar la llegada de un Gobierno irresponsable".
Roca reiteró la postura de su partido para el futuro: "A partir de estas elecciones no apoyaremos a ningún Gobierno en el que no estemos presentes. Tampoco participaremos en ningún Gobierno cuyo programa no sea equivalente al nuestro". Roca dijo, por último, que "la política más reaccionaria que se hace en Europa no es la de Margaret Thatcher, sino la de Mitterrand".
El Círculo de Empresarios invitó también a participar en sus debates a Alianza Popular, al PNV y al Centro Democrático y Social, sin que hayan contestado. No se invitó, sin embargo, al PCE.
