Escasas iniciativas de los partidos políticos españoles ante el problema de la Roca
Las declaraciones de Margaret Thatcher en el sentido de que Gran Bretaña no piensa renunciar a la soberanía de Gibraltar, provocaron indignación entre los diversos partidos políticos españoles, si bien los representantes de los mismos ofrecieron escasas soluciones al contencioso hispano-británico. "Las relaciones exteriores en este país son un escándalo" dijo el diputado comunista Gregorio López Raimundo, miembro de la comisión de relaciones exteriores del Congreso."Por lo menos el Parlamento debería enterarse de lo que está pasando en el tema Gibraltar, pero tanto en este asunto como en otros varios, como la marcha del tratado hispano-norteamericano, no tenemos ninguna información". López Raimundo se manifestó contra el aplazamiento de las conversaciones que deberían haberse iniciado mañana en Sintra y contra el mantenimiento del cierre de la verja "ya que a quien perjudica principalmente este cierre es a España".
El Ministerio de Asuntos Exteriores ofreció escasos comentarios respecto a una postura oficial de las autoridades españolas. Tan sólo se limitaron a afirmar que se espera la llegada, hoy, del vídeo con estas declaraciones, grabado por la embajada española en Noruega. El ministro Pérez Llorca y sus más directos colaboradores estudiarán hoy mismo, por tanto, las declaraciones de la primera ministra británica y sólo posteriormente puede esperarse un comunicado.
Esta cautela de los medios gubernamentales españoles no fue compartida por otros medios políticos. El vicepresidente de Alianza Popular y subdirector de la escuela diplomática, Guillermo Kirpatrick, manifestó que "diga lo que diga la señora Thatcher jurídicamente España podrá ingresar en la CEE incluso con la verja cerrada, ya que el bloqueo impuesto al Peñón no es total". En opinión de Kirpatrick estas declaraciones de la señora Thatcher habrían abortado lo que podía haber sido la preparación de un nuevo tratado que sucediera al de Utrecht.
Manuel Bueno, diputado del PSOE, reconoció que desde un punto de vista parlamentario no quedan muchas soluciones dada la época estival.
El diputado centrista Antonio Morillo, alcalde de Vejer de la Frontera, localidad cercana al Peñón, consideró las declaraciones de la señora Thatcher "improcedentes y fuera de lugar".
"Pero es ilógico e injusto que nuestros amigos de La Línea tengan que soportar en primera persona, como ha ocurrido durante tantos años, el resultado directo de una medida política que debía repercutir en toda España".
