El Madrid volvió a irritar a la afición
El amistoso disputado ayer contra el Grasshoppers, no añadió ninguna gloria a la triste campaña madridista. El equipo suizo, debilísimo, fue ampliamente derrotado, pero el fútbol del Madrid volvió a ser tan pobre como para irritar a la afición, que dirigió una nueva bronca a Bernabéu. Este, tal vez, no hizo bien en acudir al partido. Tampoco hizo bien en, al marcharse diez minutos antes del final, descararse con el público que le abroncaba.El Grasshoppers es, como se suponía, un equipo flojo y muy fuera de forma. La temporada de Liga suiza se halla suspendida por las inclemencias del invierno, y al equipo de Netzer se le nota la inactividad. El Madrid, para jugar contra este equipo, echó mano de varios de sus titulares. Dejó fuera a Benito, Camacho, Pirri, Breitner. Santillana y, Roberto, los más «trabajados». pero utilizó al resto porque Miljanic sabía que en este momento no conviene correr riesgos. Ninguno de los cuatro jóvenes de¡ Castilla citados jugaron más de medio partido.
El encuentro fue distraído, pero muy malo. El Grasshoppers. sin defensa. fue un coladero para los ataques madridistas. y en el primer tiempo se llegó a vislumbrar una goleada de escándalo. Netzer, en la media. nos ofrecía la imagen ya conocida: un sabio y preciso constructor, pero un jugador en su ocaso y sin ninguna capacidad defensiva. No obstante. el público estuvo con él, aplaudió a rabiar sus jugadas de calidad y abroncó al Madrid cuanto pudo.
En la segunda mitad, un par de cambios introducidos por el entrenador suizo y el adelantamiento del líbero Bauer, cambiaron el aspecto del Grasshoppers. que ya consiguió alternar de igual a igual con el Madrid. Los buenos pases de Netzer descolocaron varias veces a la defensa madridista, y como los blancos, en el otro área, seguían encontrando las mismas facilidades, el marcador llegó a los nueve goles. El público aprovechó cada gol suizo para abroncar al palco de Bernabéu, que se retiró diez minutos antes del final tras dirigir un saludo al modo de los campeones al público. lo que enfadó más a éste.
Por lo demás, sólo cabe añadir que Jensen y Guerini estuvieron flojísimos, y el resto a nivel discreto. De los jóvenes, mejor Sabido que Castañeda, Serrano e Isidro sólo jugaron unos minutos. El primero de ellos marcó un gran gol en precioso disparo desde más de veinte metros.
El Real Madrid, jueguen los considerados titulares o los suplentes, atraviesa un mal momento, en todos los aspectos. Después de tantas dudas y alguna que otra sorpresa, ya no se sabe si los fallos están en el terreno de juego, en las actuaciones de sus jugadores, o fuera de ellos, en el plano técnico o en el aspecto directivo. Lo cierto que es que en el Real Madrid se respira un ambiente raro, quizá desconfianza, y por otra no se vislumbra solución.
