"No echamos a nadie a la calle"

«No se está echando a nadie a la calle. Lo único que está haciendo el Ministerio de la Vivienda es provocar el correspondiente desahucio de las casas que, aun teniendo un titular, no están habitadas por éstos», declaró a EL PAIS el director general de la Vivienda, Alejandro Rebollo, acerca de los desahucios que se están produciendo en la Unidad Vecinal de Absorción de Hortaleza.«En los casos en que las viviendas estuvieran ocupadas por personas distintas del titular, añadió el señor Rebollo, lo que se está haciendo es regularizar la situación. Se da el caso, por ejemplo, de una mujer, titular de la vivienda, que no vivía en ella, pero sí lo estaba haciendo una ahijada suya. Esta ahijada no se va a ver lanzada de la vivienda, sino que lo único que hará el Ministerio será poner en orden esta situación que ahora mismo es irregular».

Las viviendas que el Ministerio construyó lo fueron, en su día, en tres etapas distintas. La primera de ellas fueron destinadas a alquiler a las personas que las necesitaran; las segundas se hicieron bajo la fórmula de ocupación con acceso diferido a la propiedad, en tanto que la tercera etapa sé construyó con la finalidad de que fueran adquiridas por los que las precisaran, como si se tratara de una venta normal en todos sus extremos,

«En el caso de la tercera etapa, dice el director general de la Vivienda, si la vivienda no está habitada, habrá de irse a la tramitación del correspondiente expediente de expropiación, para que pueda ser ofrecida a aquellos que, en estos momentos están viviendo en unas condiciones absolutamente indignas».

Con respecto a la posibilidad de que estos desahucios hayan comenzado a partir de la promesa hecha por su Dirección General a los chabolistas de Carabanchel Bajo de conseguirles viviendas en el plazo máximo de quince días, el señor Rebollo afirma que «no se trata de eso. Más concretamente, estos desahucios, que llevan su trámite como cualquier otro expediente administrativo, son fruto de la política del Ministerio iniciada hace unos meses, a fin de conseguir que las viviendas de tipo social que ahora mismo están sin habitar lo puedan ser por personas tales como es el caso de los chabolistas de Carabanchel. Sin embargo, por razones formales no se echará a nadie a la calle. El Derecho no puede estar nunca por encima de la Justicia».