Autobuses cada cinco minutos para suplir la línea 1 de metro
La EMT suplirá el servicio del suburbano, que quedará interrumpido entre el 18 de junio y el 30 de septiembre
La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital han desarrollado este lunes el servicio de transporte alternativo más "extraordinario" en la historia de Madrid para garantizar la movilidad de los viajeros durante las obras de modernización de la línea 1 del metro, entre el 18 de junio (su inicio estaba previsto para mayo) y el 30 de septiembre. El servicio, con rutas especiales gratuitas de autobús, tendrá una frecuencia de paso de entre tres y cinco minutos, tal como refleja el convenio suscrito hoy por el Gobierno regional y el Ayuntamiento de Madrid, que además contempla la posibilidad de reabrir servicios antes de lo previsto, si lo permite la seguridad.
El convenio, firmado por el consejero de Transporte, Pedro Rollán, y por la concejal de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, contempla que el coste de los servicios especiales de autobús, Plaza de Castilla-Cuatro Caminos, Atocha Renfe-Sierra de Guadalupe y Conde de Casal-Sierra de Guadalupe, será asumido íntegramente por Metro de Madrid.
Será el Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) el que costee el refuerzo en un 27% de las líneas de metro 2, 3, 4, 5, 6, 8, 9 y 10 y de otros servicios de autobús o de metro que necesiten un refuerzo adicional. En el área de influencia de la línea 1 del metro serán reforzadas también las líneas de autobús 10 (Plaza de Cibeles-Palomeras), 37 (Cuatro Caminos-Puente de Vallecas), 102 (Atocha Renfe-Estación el Pozo), 143 (Manuel Becerra-Vallecas Villa) y 145 (Conde de Casal- Ensanche Vallecas).
Una inversión de 70 millones
Metro de Madrid invertirá casi 70 millones de euros en la mejora del túnel de la Línea 1 de metro entre las estaciones de Plaza de Castilla y Sierra de Guadalupe, en unas obras impostergables por motivos de "seguridad", según el Gobierno regional.
En el caso de los servicios especiales autobuses (lanzaderas), el tramo Plaza de Castilla- Cuatro Caminos se contará con nueve autobuses más, que pasarán con una frecuencia estimada de entre 3,5 y cuatro minutos. En cuanto al tramo Atocha Renfe-Sierra de Guadalupe, contará con 22 autobuses que pasarán cada 3-5 minutos. Por último, en el tramo Conde de Casal-Sierra de Guadalupe, habrá 12 autobuses, que pasarán cada 4,5-5 minutos. El coste correrá a cargo de Metro.
Se reforzarán también, entre un 22 y un 46% las líneas 10, 37, 102, 143 y 145 de autobús a las que se incorporarán tres vehículos más en cada una de las líneas, que dan servicio a los distritos de Puente y Villa de Vallecas, los distritos que han generado más polémica a lo largo de la negociación ya que el Ayuntamiento de Madrid había denunciado el aislamiento de estas dos zonas de la capital.
La obra se hará en una sola vez y no por tramos, como reclamaba el Consistorio de la capital, pero el inicio de las obras se retrasará al 18 de junio frente a la fecha inicial prevista en un inicio por la Comunidad a finales de mayo. Comunidad y Ayuntamiento harán estudios para ir ajustando la cantidad de autobuses necesarios para la prestación del servicio. Así, lo ha dicho la delegada, quien ha afirmado que en función de esta evaluación podría aumentarse el número de autobuses.
Acortar plazos
Sabanés ha relatado que van a seguir evaluando los servicios según se van desarrollando para que tengan "el menor impacto posible". Además, entre el Consorcio, Metro de Madrid, la consejería y la concejalía que dirige se está estudiando la posibilidad de que "zonas importantes pudieran acortarse plazos" de reapertura, pero es algo "en estudio y debe basarse en condiciones de seguridad de las obras y los viajeros".
Preguntados por si este acuerdo hará que vuelva la paz social, Sabanés ha destacado el "entendimiento institucional" entre su concejalía y la Consejería que dirige Pedro Rollán, que se han sentado a "hablar, evaluar discutir y negociar y acordar"; pero ha considerado que no se puede pretender que "se resuelva de un plumazo" que la gente se manifieste o proteste en la calle.
"Respetamos las movilizaciones", ha afirmado la edil, que ha defendido que con este acuerdo se da "un paso importante". Por su parte, Rollán ha considerado que con el acuerdo suscrito y con la campaña de comunicación conjunta que van a emprender para que los distritos afectados conozcan las alternativas de movilidad "las aguas volverán a su cauce". Eso no quita para que haya algún colectivo que se manifieste, pero lo que harán será hablar con ellos y exponerles la situación.
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