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Entrevista:DESAYUNO CON... MAURO PALMA

"Ha calado la idea estúpida de ser una fortaleza"

Mauro Palma (Roma, 1948) es matemático de formación y jurista por afición y obligación. Dedicó su tesis a la lógica del sistema penal italiano, luego creó Antígona, una asociación dedicada a controlar las prisiones, y colaboró con Argentina en la investigación de los desaparecidos. En 2000 se incorporó como experto al Comité para la Prevención de la Tortura del Consejo de Europa, del que hoy es presidente. El comité, que acaba de cumplir 20 años, visita cada año centenares de centros de detención para supervisar el respeto de los derechos de las personas privadas de libertad en 47 países.

La situación, explica Palma ante un café y un cornetto (cruasán), es que "en Europa aún se producen casos de tortura y malos tratos, hay un creciente problema de masificación en las cárceles, las condiciones de retención de los inmigrantes son tremendas en muchos casos y algunos países aún colaboran en dar impunidad a los torturadores".

El matemático preside el Comité contra la Tortura del Consejo de Europa

Palma recuerda que venía a este café de pequeño porque sus padres tomaban aquí el aperitivo ("hacían un turrón muy bueno, a veces venía Fellini"). Hoy pasa buena parte de su tiempo fuera de Roma, donde la realidad es menos agradable que la memoria. "El hacinamiento en las prisiones italianas ha llegado a límites intolerables". El Gobierno de Berlusconi le ha dado la razón y ha aprobado un plan para habilitar 21.000 nuevas plazas y aplicar arrestos domiciliarios al final de las condenas.

Palma tiene el dudoso privilegio de entrar sin anunciarse en las prisiones de los países firmantes de la convención. Ha estado en España. Recuerda Intxaurrondo como "un sitio donde podía pasar de todo y daba miedo entrar". Pero, más allá de los fallos particulares de cada país, Palma quiere subrayar cómo la industria del miedo se ha convertido en una moda política. "Europa está pasando del derecho penal del reo al derecho penal del enemigo. Sobre todo con los inmigrantes. La Liga del Norte lo vio antes que nadie, pero en muchos sitios se impone ese mismo discurso demagógico que acaba legitimando el maltrato. La trampa consiste en decir que es más eficaz y barato encerrar a una persona que reinsertarla. Es mentira, el circuito carcelario sólo genera más crimen. Como dijo Poincaré, 'entran cerdos y salen salchichas".

Así y todo, prosigue, "en Europa ha calado la estúpida idea de que debemos ser una fortaleza. La ampliación a seis meses del plazo de retención de los inmigrantes fue una decisión equivocada y, sobre todo, inhumana".

Palma y su equipo han elaborado un informe reservado porque creen que Italia incumple tres exigencias de la Convención Europea de Derechos Humanos. "No sabemos si Roma informa de sus derechos de asilo a los inmigrantes, si toma las decisiones de manera individual, ni si se ocupa de garantizar que Libia no tortura a los sin papeles o los manda a otro país". Antes de despedirse, deja otras noticias inquietantes. "En Europa se sigue torturando. Estamos llenos de casos y denuncias muy creíbles. El momento peor es el que sigue a los arrestos. Puedo decir que un Guantánamo en Europa no es posible, pero temo que sigue habiendo cárceles secretas". ¿Dónde exactamente? "Eso no puedo decirlo. Digamos que en el Cáucaso hay centros, lugares de paso... Pero el gran agujero negro es Bielorrusia, allí se ejecuta todavía".

Mauro Palma sostiene que en Europa se sigue torturando
Mauro Palma sostiene que en Europa se sigue torturandoS. GENGOTTI

Café Rosati. Roma

- Dos cafés: 8 euros.

- Dos cruasanes: 6 euros.

- Un zumo de naranja: 7 euros.

Total: 21 euros.

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