Dos mujeres muertas a manos de sus parejas en Sevilla y Girona

Dos casos de violencia de género muy similares se ha registrado esta mañana en Andalucía y Cataluña con menos de tres horas de diferencia. En ambos casos, los hombres han matado a cuchilladas a sus parejas y acto seguido se ha entregado. Uno de ellos, de origen marroquí, llevaba una carta de confesión. Las dos mujeres tenían hijos, una de una relación anterior y la otra de su presunto asesino, y ninguna de ellas había denunciado malos tratos. Una de las víctimas estaba tramitando el divorcio. Ya son 29 las víctimas mortales de la violencia de género en España en lo que va de año, ocho más que por las mismas fechas de 2009. Andalucía, con ocho mujeres muertas, está al frente de esta siniestra estadística. Cataluña, con cuatro mujeres muertas, ocupa el segundo puesto.

El primer caso se ha producido a primera hora de la mañana en la localidad sevillana de Pruna (3.000 habitantes). El hombre ha matado con un arma blanca a su pareja y poco después se ha entregado en el cuartel de la Guardia Civil. Según han informado fuentes del Instituto Armado, los hechos se han producido sobre las siete de esta mañana en la vivienda de la mujer, en la calle Algámitas de Pruna, un pueblo de la Sierra Sur situado a unos cien kilómetros de la capital sevillana. Al parecer, el hombre ha entrado en la casa forzando la puerta de atrás.

Según las mismas fuentes, la víctima, a la que llamaban Lupe, es G.B.M., de 41 años, vecina de Pruna, mientras que el presunto autor de su muerte es F. M. P. R., de 35 y también vecino de la localidad aunque natural de El Coronil (Sevilla), quien acto seguido de cometer el crimen se ha presentado en el cuartel de la Guardia Civil y ha confesado haber matado a su compañera. Una vez en la vivienda, lo agentes han hallado en su interior el cadáver de la mujer con heridas de arma blanca, por lo que han detenido a su pareja. La víctima tenía tres hijos de una relación sentimental anterior, que no estaban en la casa en el momento de la agresión.

"Uno no se espera algo así"

La mujer no había presentado denuncias por malos tratos contra el presunto homicida, han informado fuentes de la investigación. Tampoco había solicitado ningún tipo de servicio al Instituto Andaluz de la Mujer ni al Ayuntamiento de Pruna. El detenido se encuentra en dependencias policiales a la espera de sea puesto a disposición judicial, entre mañana martes y el miércoles. El Equipo de Mujer-Menor de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla se ha hecho cargo de la investigación.

Por su parte, la alcaldesa de la localidad sevillana, María Eugenia Rodríguez (PSOE), ha señalado que todo el pueblo está "consternado" y "hecho polvo porque uno no se espera nunca una cosa así". En este sentido, la alcaldesa, que nada más conocer los hechos ha acudido en el lugar del crimen, ha añadido: "Me duele mucho que haya ocurrido un suceso tan fuerte y dramático como éste". Tras informar de que el Ayuntamiento ha decidido suspender el pleno municipal que tenía previsto celebrar esta tarde, Rodríguez ha destacado que la víctima era una mujer "muy trabajadora" que se dedicaba a limpiar en colegios y en bares que su propia familia posee en el municipio. El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, ha llamado a las mujeres que sufren esta lacra a denunciar, ya que es el único modo de evitar más muertes.

El segundo caso se ha registrado en la localidad gerundense de Salt (27.000 habitantes) a las nueve y media de la mañana, informa Rebeca Carranco. El hombre, Hassan El A., de 53 años y de origen marroquí, ha asestado hasta cinco puñaladas a su mujer, también marroquí, a la altura del número 35 de la calle Doctor Castany -pleno centro de la localidad-. La mujer, Farida B., de 46 años, se encontraba aún con vida cuando una patrulla de la policía local ha llegado al lugar donde ha ha producido la agresión, aunque ha fallecido poco después de ingresar en el servicio de urgencias del hospital de Salt.

Una testigo ha afirmado que ambos, que tenían cuatro hijos en común, venían discutiendo y que, a la altura de la carpintería que hay en esa calle, el hombre la ha agredido con arma blanca y que, una vez en el suelo, le ha propinado varias patadas. El agresor se ha entregado en la comisaría de la Policía Local de Salt, tras el crimen, que ha sido premeditado ya que llevaba su confesión por escrito. El hombre había escrito tres cartas, una para su hija, otra para la policía y una tercera para la escuela a donde asisten sus hijos.

Ahora se encuentra ya en dependencias de los Mossos d'Esquadra en esta población, que se han hecho cargo de la investigación de los hechos. Fuentes municipales ha señalado que el agresor, sin antecedentes penales, había denunciado recientemente a la víctima porque se había marchado de la vivienda familiar. Las mismas fuentes han señalado que no había denuncias por violencia de género. El matrimonio, que residía desde hacía un tiempo en Salt, tenía cuatro hijos. El mayor, de 25 años, vive en Marruecos. Cuando la mujer se fue de casa, se llevó consigo al menor, de ocho. El padre se quedó con los otros dos, chico y chica. La víctima fue atendida por los servicios sociales de Salt tras irse de casa y, aunque nunca denunció a su esposo, reconoció que recibió maltratos psicológicos. Estaba realizando los trámites para pedir el divorcio.