La Cumbre del Clima impulsa un Kioto 2 para después de 2012

Las exigencias del Protocolo de Kioto para luchar contra el calentamiento global no se detendrán en 2012. La Cumbre del Clima de Nairobi acordó ayer, en su clausura, que la reducción de gases de efecto invernadero proseguirá sin ninguna interrupción más allá de esta fecha y que la revisión del protocolo -el alumbramiento de Kioto-2- se iniciará antes de que concluya 2008. Los países ricos se han comprometido a reducir las emisiones en un 50% en un futuro no precisado, en el horizonte de 2050. La cumbre ha decidido también poner en marcha un plan de adaptación al calentamiento global para los países pobres.

La conferencia de Nairobi ha sido considerada por los expertos como de transición entre Kioto y la siguiente fase. Pero ha quedado garantizada la continuidad. El proceso exige un tiempo de trabajo para diseñar el futuro régimen de lucha contra el cambio climático y poner de acuerdo, al menos, a los 166 países firmantes del protocolo en compromisos que afectan a sus economías, sus perspectivas de desarrollo y sus políticas.

"Estoy muy satisfecho porque en esta reunión se han aprobado medidas reales y prácticas a favor de los países en vías de desarrollo y por la puesta en marcha de la coordinación efectiva de las distintas instituciones de Naciones Unidas en el marco del problema del cambio climático", resumió ayer Yvo de Boer, secretario general de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, cuya 12ª conferencia de las partes ha convocado en Nairobi a más de 6.000 participantes.

El acuerdo para reducir las emisiones de CO2

de los países ricos -una propuesta para incorporar a los pobres quedó para el año que viene- subraya que las obligaciones deben estar concretadas y listas a tiempo para que entren en vigor en 2012, cuando acaba el primer periodo de cumplimiento del Protocolo de Kioto. Por tanto, la fecha implícita para establecer esos compromisos futuros de los países desarrollados es 2009.

El objetivo de la cumbre era dejar claro a empresas y gobiernos que las medidas actuales continuarán vigentes, que seguramente se intensificarán y que el mercado internacional de emisiones no es una fase temporal que puede olvidarse después de 2012. Los grupos ecologistas celebraron este logro, aunque es insuficiente para el alcance del problema del cambio climático.

Más difícil resultó cerrar otro eje de esta conferencia: el calendario y borrador del proceso de evolución del mismo Protocolo de Kioto, que deberá especificar reglas para cumplir los objetivos.

El problema, explican los expertos en Nairobi, es que el protocolo entró en vigor con retraso (2005) respecto al plan inicial, que contaba con tener el acuerdo en marcha en 2000. De haber sido así, la revisión se habría hecho en torno a 2002 y los compromisos futuros se habrían empezado a negociar poco después con tiempo más que de sobra para tener todo listo en 2012.

Varios líderes europeos han anunciado ya su apoyo al objetivo del 50% de reducción en 2050, entre ellos Reino Unido y Francia y el propósito de la UE es que con este fuerte recorte se logre evitar que la temperatura del planeta aumente más de dos grados. La fase actual de Kioto establece que los países desarrollados habrán reducido sus emisiones de invernadero en un 5,2% en 2008-2012 respecto al nivel de 1990. Una propuesta del delegado ruso acerca de que los países en desarrollo asuman compromisos voluntarios de contención de emisiones mantuvo ayer en vilo a los participantes en la cumbre hasta el último momento, ante la oposición decidida de los países en desarrollo. Finalmente, se aplazó el asunto al año que viene.2, aunque por ahora no ponen fecha- y empezarán a debatirse en 2008. En EE UU, la victoria demócrata en las legislativas ha dado esperanzas a los que exigen que este país ratifique el protocolo.