Silencio, cámara, acción
Quizá los cines pierdan espectadores, pero España va llena de festivales de cortometrajes en los que se foguean los futuros candidatos al Oscar
Cámaras, acción, incluso con accción basta. Si no tienen cámara en propiedad, que suele ocurrir, la alquilan o se la piden a un amigo o al pariente más cercano. El caso es rodar y rodar, con cámaras domésticas o profesionales, o incluso fotográficas. Son la cantera del cine del futuro, y aquí van algunas muestras.
Norma Nebot "Soy la mujer orquesta"
Norma Nebot prepara un documental sobre Teatro Dentro, un grupo teatral en la cárcel de Quatre Camins (Barcelona). Lo rodará con cámara de vídeo de alta definición. "Soy la mujer orquesta. Lo hago todo: imagen, sonido, montaje... Rodar en cine me encanta, pero es inconcebible cuando se trata de un proceso de observación que puede extenderse en el tiempo, como suelen ser los documentales".
Nebot (www.normanebot.com), madrileña de 33 años, es realizadora. Estudió en la escuela de cine de Londres y desde que terminó en el año 2003 ha rodado cortos de ficción, documentales y making off, como el de la película Io Don Giovanni, de Carlos Saura y Manolete, protagonizado por Adrien Brody y Penélope Cruz.
Desde hace tres años y medio Nebot sólo trabaja con vídeo. "La inmediatez, economía y facilidad de uso del vídeo es mucho mayor. Ahora, además, las cámaras son muy pequeñas y con una calidad increíble. Antes, o tenías una betacam o no hacías nada". Durante un tiempo compartió una cámara de alta definición. En marzo compró la suya, una Sony HVRV1E, con la que ahora está rodando en Sevilla el making off de la película Yo también.
El año pasado Nebot fue finalista del festival Notodofilm con Llueve, un documental sobre la India y La Roca, la rama, la vaca y la mujer, una ficción creada a partir de imágenes de sus rodajes en el país asiático.
Eduardo Castiñeiras "Hay mucha gente y muy buena"
"Yo acabo de entrar y hasta que no estás dentro no te das cuenta de la cantidad de gente que hay y lo buena que es. A cualquier pequeño festival se presentan 300 o 400 cortos". Eduardo Castiñeiras está filmando La leyenda del rey, un corto de 20 minutos, a lo grande. "Logramos la colaboración de Pilar Bardem y rodamos en el castillo de Consuegra".
A sus 23 años el madrileño Castiñeiras es autodidacta. Estudia Administración de empresas y no tiene un duro, porque se lo va dejando en la librería de cinéfilos Ocho y Medio. Allí lo aprendió todo, "y en los cines y en un cursillo de guiones de José Luis Borau". Hace un año se atrevió a rodar su primer corto, Diógenes, que presentó a NotodoFilmfest. Hasta entonces practicaba con sus amigos universitarios y su cámara Panasonic Handycam. "Todo con presupuesto cero, excepto las pizzarrass para el equipo. Ahora con La leyenda del rey he saltado al mundo de las subvenciones y a un presupuesto de 80.000 euros. Acojona".
Moisés Romera y Marisa Crespo
Esta pareja de valencianos llevan 10 años en el mundillo, aunque su vocación fue "tardía". Moisés es ingeniero y trabajaba en una metalúrgica. El destino quiso que en el 25 aniversario de la empresa le tocara en sorteo una cámara de vídeo. "Fue una revelación. Abandoné el trabajo, empecé a hacer cortos amateurs y me entró el gusanillo". Su pareja, Marisa, también abandonó la informática para dedicarse al vídeo. Desde entonces han hecho cortos de ficción, documentales, anuncios (wwwproyectafilms.com), impartido cursos de guión y realización para adultos y participado en 300 festivales de 30 países. resultado: 55 premios.
"Somos de la generación vídeo"
"Somos de la generación vídeo. Alguna vez hemos tenido la oportunidad de hacerlo en cine, pero no nos interesa. No sólo por coste. también por logística, comodidad, independencia... ¡si hasta lo montas en casa! Además ahora hay cámaras que si no igualan, superan a las de cine, como la Red One. El sensor tiene el mismo tamaño que una de 35 mm y la misma resolución. Además trabaja en RAW, o sea sin comprimir".
La gente de la vieja escuela, dice Marisa, "asocia hacer vídeo con ser amateur, con desenfocar. Es mentira. Si hay un buen guión, gusto y estética, la cámara no importa". Su cortometraje Papás y mamás ha tenido 1,5 millones de visitas. "Lo colgamos en nuestro blog saladeproyeccion.blogspot.com, luego la gente lo puso en Youtube".
Internet es el medio ideal para el vídeo, aseguran, aunque tenga una cara y una cruz porque "da poco dinero, pero mucha difusión, que es lo que nos ha generado oportunidades de trabajo.
Suda Sánchez "Pesa más el guión que la cámara"
Suda Sánchez es un cordobés de 29 años que, tras estudiar comunicación audivisual, trabaja en la productora Boomerang. En sus ratos libres se dedica a hacer cine. "Hago cortos desde siempre. Recuerdo el primer vídeo que hice, Superhéores de barrio, con una cámara Sony analógioca que trajo mi padre una Navidad. Era una cosa infantil que mil veces he estado tentado de quemar, pero al final me arrepiento porque tiene algo de bonito".
Sánchez nunca ha tenido cámara propia. "Pesa más el guión que la cámara que lleves. Tengo unos amigos catalanes, el dúo humorístico Vengas Monjas, que lleva miles de descargas en YouTube. Graba sus vídeos con cámaras fotográficas, con lo cual paran el rodaje para descargar la tarjeta en el ordenador y luego siguen. Al final, el formato es lo menos importante".
Cada vez que le bulle un guión en la cabeza Sánchez comienza a buscar a amigos con cámaras. "Recuerdo especialmente la Canon XL2, era la reina de las cámaras hasta hace poco. Ahora es la RedOne, y luego están los lentes, los objetivos que, pese a todos los adelantos resulta que imitan el efecto del cine químico, el celuloide de toda la vida. es algo contradictorio".
El primer corto que presentó a concurso le costó a Sánchez 50 euros, el último Alguien, que está montando, unos 300. "En este era muy importante el diálogo, así que alquilé un buen equipo de audio, que me costó 200 euros. La gente se enrolla bastante con los cortos y es altruista. La era digital ha democratizado la forma de hacer cine. Por contra, hay mucha morralla, pero todo el mundo tiene la posibilidad de intentarlo".
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