¿El cine mató al cómic?

Hace unos años, las decenas de miles de fans que llegaban a San Diego Comic-Con abarrotaban las salas donde los editores de Marvel o DC anunciaban las nuevas series que saldrían tras el verano y los acontecimientos que protagonizarían sus héroes más queridos. Hoy, la trigésimo octava edición del mayor acontecimiento relacionado con los cómics en los EE UU atrae más visitantes que nunca, por encima de los 100.000, pero esta vez seguirán llenando las salas para estar al día sobre estrenos cinematográficos. Este año, los protagonistas no han sido los tebeos, sino las películas.

Las grandes revelaciones toman forma de teasers o tráileres, y la muchedumbre asiste con expectación a los avances de las esperadas versiones de The Dark Knight; la nueva incursión de Batman de la mano de Christopher Nolan; la cada vez más sugerente Iron Man, con Richard Downey Jr. como el multimillonario Tony Stark, escondido tras su todopoderoso traje cibernético; el nuevo intento de relanzar a Hulk, esta vez con Edward Norton y Liv Tyler en los papeles estrella o lo mucho que Neil Gaiman -el famoso guionista de Sandman-, se está multiplicando para el cine, firmando el guión del Beowulf enteramente digital de Zemeckis o preparando la adaptación de la novela gráfica Muerte, el alto coste de la vida. Sin olvidar, por supuesto, el proyecto que más ríos de tinta digital está haciendo correr en los blogs: la adaptación a la gran pantalla de Watchmen. Considerada como la obra maestra del género de superhéroes, la obra de Alan Moore y Dave Gibbons verá la luz en 2009 con un reparto de actores desconocidos que trabajarán a las órdenes de Zack Snyder, ya curtido en estas lides tras llevar a la pantalla la epopeya espartana de Frank Miller, 300.

La adaptación de 'Watchmen' verá la luz en 2009 con un reparto de actores a las órdenes de Zack Snyder

Entre tanta primicia cinematográfica, los tebeos pasan a un segundo plano y ni Marvel ni DC han hecho anuncios significativos, más allá de la continuación de los macrocrossovers a los que parecen abonadas las editoriales y tan buenos resultados les están proporcionando. Series que entrelazan todas las colecciones y que obligan a los aficionados a comprar todas las novedades si no quieren perder el hilo de la historia. Un continuismo del que, paradójicamente, escapan los anuncios que tienen que ver con otros medios, como los anhelados cómics basados en la serie televisiva Héroes, considerada como el mejor ejemplo del género que se ha visto en mucho tiempo y que publicará DC. Curiosamente, la noticia más interesante sobre cómics en este Comic-Con tiene que ver mucho con sus inicios, porque la editorial Dark Horse ha anunciado la reedición de un clásico de los setenta: las revistas Creepy y Eerie de la editorial Warren, dos mitos del género de terror que tuvieron un especial protagonismo de toda una generación de autores españoles, como José Ortiz, Esteban Maroto, Leopoldo Sánchez, Brocal Remohí, Luis Bermejo, Rafael Auraleón o Josep María Beà.