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Tentaciones
Reportaje:CINE

ARRUINE ASÍ SU CARRERA

Tiene talento. Nadie lo niega. Pero Michelle Rodríguez (Bexar County, Texas, EE UU, 1978) también tiene la receta perfecta para cargarse una carrera. Ella solita y sin ayuda de nadie. Ahí están sus elecciones para probarlo. Primero, alzándose sobre 350 aspirantes para su primer protagonista en una peli de boxeo. Luego, con el acelerón de The fast and the furious (A todo gas), que la lanzó al estrellato del cine adrenalínico, pero de cuyo encasillamiento no parecer conseguir salir. Buscó refugio -como tantos otros quemados por Hollywood- en la televisión. Varios arrestos después, esta actriz de sangre medio puertorriqueña, medio dominicana, reincide en la maldición millonaria de Fast & furious (cuya cuarta entrega se estrena la semana que viene en España bajo el prometedor título de Aún más rápido), una especie de reunión infernal de la que algunos no logran huir. Eso sí, con la vista puesta en su próxima tabla de salvación: James Cameron. Repasamos con ella su encantadora carrera.

"Ya no soy tan vulgar como solía. He crecido. Mis tetas, desde luego, han crecido"
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'Girlfight' o la mujer que se peleó contra Hollywood. Su espíritu luchador la sacó del anonimato (y de las peleas callejeras) para darle una oportunidad en el cine. Y hasta en el boxeo, porque, tras su preparación pugilística como Diana Guzmán, le ofrecieron la posibilidad de ser profesional. Aunque prefirió el cine. "Pero estaba todo el tiempo 'jódete por aquí, jódete por allá'. Haciendo gestos obscenos. Ya no soy tan vulgar como solía ser. He crecido. Mis tetas, desde luego, han crecido. ¡Y yo que pensaba que dejaban de crecer a los 21!", explica la fina de Rodríguez.

'A todo gas' o vaya acelerón. "La culpa fue de Vin [Diesel, estrella del filme], que me eligió tras ver Girlfight y lanzó mi carrera. Si no, ahora estaría haciendo pelis independientes". Aunque de los problemas de velocidad sólo se culpa a sí misma: "Soy una yonqui de la adrenalina. Mi deportivo es un MP3 con pedales con el que me encanta ir a todo gas. Claro que me deben de quedar dos puntos en el carné con tantas estupideces, exceso de velocidad, alcohol... Así que ahora conduzco un Toyota Prius, lento, muy lento".

'S.W.A.T.' o la 'hombría' de Michelle. Marzo de 2002: arrestada por asalto tras pelearse con su compañera de piso. Noviembre de 2003: arresto por conducir borracha y huir de la escena del crimen. Primer paso por el trullo. En el cine dio vida a uno de estos nuevos hombres de Harrelson, que coincidió con el inicio de su fama como bisexual. "Yo soy de las que le gusta jodidamente grande", dice con su lengüita sin especificar el qué. "Grande o nada", recalca. En lo legal dice que ha aprendido la lección (tras otro par de arrestos y paseos por la cárcel). "Soy de las que piensan que todo pasa por una razón. Tengo que ir donde me lleva la vida y aprender de ello. Soy tan extremista que necesito situaciones límite para aprender algo".

'Perdidos' (más que un pulpo en un garaje). Con Rodríguez no hay disculpas: a lo hecho, pecho. Y los mismos orígenes hispanos que le dan su belleza tienen mucho que ver con el torbellino de su carrera. "En EE UU soy la hispana, y cuando voy a República Dominicana soy la gringa. Y lloro cada vez que voy a Puerto Rico. ¡Está tan americanizado! Un burger en cada esquina, pero con arroz y frijoles en lugar de patatas fritas", lamenta. Aterrizar en Hollywood no resultó fácil: "Me sentí muy confusa", recuerda. "O quizá perdida" En cualquier caso, un estado perfecto para la serie de J. J. Abrams. Apareció en la segunda temporada y fue expulsada poco después por su errático comportamiento. Los de la serie dijeron que su asesinato estaba escrito desde el principio. "No sé con esos chicos. Son tan misteriosos", zanja ella con una sonrisa helada.

'Avatar' o los avatares que la esperan. Si Mickey Rourke puede regresar, ¿por qué no Michelle? Ahí está Avatar, la esperada primera película de James Cameron desde Titanic, concebida en 3D. "Esta cinta es el equivalente actual a la transición del cine de blanco y negro al de color", adelanta sin rubor. ¿Dispuesta a mantenerse en curso? "No hay más para una chica como yo. Si no quieres ser la novieta, ni la que es capturada sin razón, ni la que tiene el corazón partido... O si no te quieres desnudar para esa escena de sexo supercaliente..., no hay mucho más trabajo, así que seguiré haciendo S.W.A.T, The fast and the furious y de piloto en Avatar. Y tan contenta".

Fast & furious (Aún más rápido) se estrena el 3 de abril en cines de toda España.

Michelle Rodríguez, desafiando los límites del equilibrio, con Vin Diesel al volante, en <i>Fast &amp; furious (Aún más rápido).</i>
Michelle Rodríguez, desafiando los límites del equilibrio, con Vin Diesel al volante, en Fast & furious (Aún más rápido).

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