Mario Fernández sitúa la fusión de las cajas no antes de finales de 2011
Prieto sostiene que aún es posible llegar a acuerdos con el PP sobre la Vital
El presidente de la BBK, Mario Fernández, aseguró ayer que este año va a resultar "extraordinariamente complejo" para todo el sector financiero, hasta el punto de considerar que 2010 es el peor ejercicio para iniciar un proceso de fusión con la Kutxa guipuzcoana y la Vital alavesa. Para el presidente de la caja vizcaína, la 14ª en tamaño en la clasificación general de bancos y cajas, pero la segunda en beneficios por activos, sólo aventajada por la Caixa, ese proceso podría empezar como muy pronto a finales del próximo año, lo que situaría el fin de las operaciones y la consecución de una caja vasca unificada a partir de 2012. "Estamos en un año extraordinariamente complejo. Vamos a verlo cuando empiecen a hacerse públicos los resultados de bancos y cajas del primer trimestre y el primer semestre", apuntó en una entrevista en ETB.
Fernández apuesta por mantener el 'blindaje' de las grandes empresas
El presidente de la primera caja vasca opinó que se van a producir "sorpresas inesperadas" por su magnitud, con cuentas de "resultados muy preocupantes" en un determinado número de entidades de crédito. "En ese contexto, entrar en un proceso tan complejo como uno de fusión que se ha intentado ya en dos ocasiones y ha fracasado en las dos, era la decisión más desacertada que se podía tomar", concluyó.
Fernández también se opuso a la posibilidad de eliminar el blindaje en los consejos de administración de algunas empresas vascas, que limitan al 10% los derechos de voto en ciertos casos, para garantizar su "anclaje" en Euskadi. El presidente de la BBK se refería sobre todo a compañías como Iberdrola y Petronor (propiedad de Repsol), posibles objetos de compra y deslocalización, si no total, sí parcial, de no estar blindadas.
El Grupo Socialista en el Congreso ha presentado una enmienda para eliminar las limitaciones de derecho de voto en los estatutos de grandes compañías.
Fernández explicó que se trata de firmas cuya presencia en Euskadi garantiza la existencia de numerosos proveedores y subcontratas con miles de empleos y creación de riqueza.
Precisamente esa reflexión le llevó a considerar un problema para la BBK la falta de tamaño. "Es uno de los problemas" que tiene su caja y sobre los que la entidad reflexiona. En su opinión, la fusión podría resultar incluso insuficiente: "No salimos tampoco demasiado bien en una foto de tamaño. Incluso después de la fusión de las tres cajas".
Mientras tanto, en Álava todavía siguen escuchándose los ecos del enfrentamiento entre el secretario general de los socialistas alaveses, Txarli Prieto, y el portavoz del PP en las Juntas de este territorio, Javier de Andrés, a cuenta del acuerdo entre el PSE y el PNV que excluye a los populares de los órganos de la Vital y que politiza al máximo la institución.
Prieto aseguró ayer que ha realizado numerosas propuestas al PP para formar parte de los órganos de dirección y control de la caja alavesa y la Cámara de Comercio, que se renovarán a finales de mes. El PP, sin embargo, sostiene que los socialistas no han tenido intenciones serias de llegar a un acuerdo al exigir, con carácter previo, a cualquier acuerdo, que el PP retirase su demanda que considera ilegal el nombramiento de Gregorio Rojo como presidente de la caja en marzo de 2008.
El dirigente socialista reiteró ayer que "siguen existiendo posibilidades de acuerdo", con el PP, aunque cada vez son menores, y lo atribuyó no sólo a la falta de tiempo, ya que el próximo día 30 se renueva la mitad de la Asamblea de la Vital, sino al tono de las declaraciones de De Andrés, quien llamó a Prieto "enemigo del cambio en Álava" por pactar con el PNV.
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