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La colección regional se muda

El viaje de la gran colección de arte nunca vista

Unas 1.500 obras de arte contemporáneo, en su mayoría inéditas, se expondrán en Móstoles

Patricia Ortega Dolz

Llevan ocultos años en las catacumbas de la Consejería de Cultura (Alcalá, 31). Bajo tierra, a 18 grados centígrados. Algunas llevan ahí desde 1999, cuando comenzó a formarse la Colección de Arte Contemporáneo de la Comunidad, que cuenta con 1.526 piezas. Las más afortunadas han salido esporádicamente, para alguna exposición (en Madrid, en otras ciudades españolas y fuera de España), o para ser colgadas en algún despacho, pero otras muchas no han sido expuestas nunca. "Las más solicitadas son siempre las mismas, las conocidas: fotografías de Ramón Masats, algún picasso, y las obras del fotógrafo madrileño Juan Manuel Castro Prieto, porque esta colección apenas se conoce, no tiene ni catálogo", explicaba ayer María Asunción Lizarazu, la conservadora, mientras supervisaba el embalaje de las obras para el viaje. Se van a Móstoles, al Centro de Arte 2 de Mayo (CA2M), donde se mostrarán paulatinamente. "Hay que conocer bien lo que tenemos, elaborar un catálogo y sacar por fin las piezas", dice el director del centro, Ferrán Barenblit.

"Ya hemos empezado a descubrir obra", decía ayer Barenblit, mientras esperaba la llegada de otro camión con decenas de piezas de la colección. "En la segunda planta de CA2M, la muestra Colección I, presenta algunas de las últimas adquisiciones como obras de Erwin Wurm, José Guerrero o Ignasi Aballi". Piezas que plantean cuestiones actualmente abiertas en el arte contemporáneo, como su capacidad crítica y su cuestionamiento de la realidad.

En su origen la colección de Arte Contemporáneo de la Comunidad se centró en la imagen (entre el 60 y 70% de la colección es fotografía) pero, en los últimos años, su interés se ha extendido a otros soportes como el vídeo o la instalación. "La clave es su actualidad, se buscan artistas que están emergiendo y se incorporan las nuevas disciplinas y soportes en los que trabajan", comentaba ayer Isabel Rosell, directora general de Archivos, Museos y Bibliotecas, que con un ojo controlaba el montaje de la exposición de Annie Leibovitz, que se inaugura el próximo 18 de junio, y con el otro, el traslado de las obras de arte contemporáneo de la región.

Una colección que no ha dejado de crecer: "De hecho una tercera parte, algo más de 500 piezas, se han adquirido en los últimos tres años", aseguraba la conservadora María Asunción Lizarazu. Entre las últimas destacan la obra ganadora del Premio ARCO de la Comunidad de Madrid para Jóvenes Artistas que este año ha sido la instalación de David Maljkovic titulada Nothing disappears without a trace, compuesta por 27 collages y una construcción; una obra de la islandesa Elín Hansdóttir (en cuyas instalaciones trata de sumergir al espectador); o la obra de Bestué/Vives, La Confirmación, producida específicamente para un futuro proyecto de exposición del CA2M (en este caso en colaboración con el Centro de Arte Santa Mónica, de donde vino Baranblit hace casi un año), y una fórmula de ingreso de colecciones por la que el centro apostará ante el futuro: "Producir para también adquirir", decía Barenblit.

Con este traslado se le da por fin un asentamiento definitivo a una colección enterrada y se la enmarca en otra institución: "Es un reto sacarla de la almendra absorbente de Madrid y traerla aquí para su difusión y conocimiento, tanto en exposiciones en el propio centro como en otras mediante exposiciones itinerantes o préstamo".

Existe un comité de adquisiciones (formado por la propia Rosell, Barenblit, José Guirao, director de La Casa Encendida, el gestor cultural Carlos Urroz y Lorena Martínez Corral, entre otros) que cuenta con un presupuesto anual de 200.000 euros (más los 700.000 provenientes del 1% del presupuesto para infraestructuras de la Comunidad) que discuten las propuestas que les llegan (de galerías o particulares) y proponen otras. El criterio: apostar decididamente por el arte contemporáneo más joven, de calidad (sin olvidar la representación de artistas consagrados) y por la diversidad y riqueza de las tendencias artísticas, nuevas técnicas y soportes. Se han incorporado obras de autores de renombre nacional e internacional como Carlos Pazos -Barcelona, 1949: sus obras hacen referencias constantes a la infancia y a los tiempos pasados. Sus trabajos tienen una estética inocente y kitsch-, Jorge Galindo -un madrileño del 65, maestro del collage y experto en fragmentar las imágenes y recomponerlas en una serie hilarante de combinaciones-, Eduardo Arroyo, Natividad Bermejo -artista crecida a caballo entre Logroño y Madrid que se centra en la epidermis de los materiales y en las relaciones entre lo geométrico y lo orgánico-, Antonio Ballester, y otros más conocidos como Palazuelo, Alfredo Alcaín, Martín Chirino, Keiji Kawashima o Alberto García Alix.

También se ha obtenido obra mediante donaciones, e incluso por aportaciones en pago de impuestos, como el caso de las esculturas de Jorge Oteiza, Julio González, Giacometti y Ángeles Marco; y 84 cuadros de la familia Madrazo. Estos últimos, en cambio, permanecerán en las catacumbas del 31 de Alcalá, hasta que alguien los pida.

<b>Trabajadores del Centro de Arte 2 desembalan la obra </b><i>Sre / ischwinmer 38,</i> del fotógrafo Wolfgang Tillmans, adquirida en 2008.
Trabajadores del Centro de Arte 2 desembalan la obra Sre / ischwinmer 38, del fotógrafo Wolfgang Tillmans, adquirida en 2008.LUIS SEVILLANO
<b>Dos trabajadores  trasladan  el cuadro </b><i>Cantos: Inspiración II,</i> de Dis Berlín, adquirido en ARCO 2007 a la Galería Siboney.
Dos trabajadores trasladan el cuadro Cantos: Inspiración II, de Dis Berlín, adquirido en ARCO 2007 a la Galería Siboney.L. S.

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Sobre la firma

Patricia Ortega Dolz
Es reportera de EL PAÍS desde 2001, especializada en Interior (Seguridad, Sucesos y Terrorismo). Ha desarrollado su carrera en este diario en distintas secciones: Local, Nacional, Domingo, o Revista, cultivando principalmente el género del Reportaje, ahora también audiovisual. Ha vivido en Nueva York y Shanghai y es autora de "Madrid en 20 vinos".

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