El fiscal pide 22 años para el acusado de un crimen en Tetuán

Un total de 22 años de prisión. Esa es la pena a la que se enfrenta el acusado Jesús Borja Borja, de 28 años, a partir de mañana en la sección II de la Audiencia Provincial de Madrid. La fiscal le acusa de haber asesinado a tiros al cámara de televisión Iván Ruiz Lucena, de 32 años, en 2007 en el distrito de Tetuán, además de tenencia ilícita de armas. La acusación particular, ejercida por la familia, eleva la petición a 27 años, ya que añade el delito de robo con violencia e intimidación. Un jurado popular se encargará de determinar si Borja es culpable o no del crimen.

Según el relato de la fiscalía, los hechos ocurrieron a las nueve de la noche del 8 de noviembre de 2007, cuando Jesús Borja accedió al aparcamiento situado en el número 18 de la calle de Carmen Montoya, perpendicular a la avenida de Asturias (Tetuán), y bajó hasta la segunda planta. Justo en ese momento estaba estacionando su Audi Iván Ruiz. Le acompañaba su novia, que no llegó a bajar del coche. Se inició una conversación entre el acusado y el cámara de televisión.

En un momento dado, Borja sacó una pistola semiautomática del calibre 6,35 y disparó hasta tres veces a su víctima, sin llegar a alcanzarle. Según el relato del fiscal, el cámara logró salir corriendo del garaje. Fue perseguido por su agresor, que, a la altura del número 19 de calle, le volvió a disparar dos veces. Una de las balas le entró a la víctima por la región temporo-parietal y se le quedó alojada en la zona occipital. Ruiz murió a las dos de la tarde del día siguiente como consecuencia de "destrucción de centros vitales".

Borja fue detenido a finales de noviembre de 2007 y, desde entonces, se encuentra en prisión. Tiene ocho antecedentes por lesiones, robos con violencia y robos de coches, que, según la fiscalía, no le son computables para una posible reincidencia en este juicio.

El abogado de la familia de Ruiz, Antonio Segura, pedirá cinco años más de cárcel al entender que Borja intentó atracar al cámara de televisión. Basará su solicitud en el testimonio de la novia del fallecido, que oyó cómo Ruiz le ofreció varias veces su cartera al presunto asesino y le dijo: "Llévate lo que quieras". También se apoyará en otros testigos que escucharon a la víctima chillar en la calle "¡Al ladrón! ¡Al ladrón!, que me quiere robar".

Las investigaciones se centraron en un principio en el entorno de la novia, cuya ex pareja había amenazado de muerte a la mujer y al propio Ruiz. Sin embargo, los relatos de los testigos contribuyeron a que se descartase esa hipótesis. Una hora antes del crimen, el supuesto asesino mantuvo una discusión con los empleados de un supermercado Dia cercano al lugar del crimen. La descripción que dio una trabajadora del protagonista del incidente coincide con la del presunto asesino de Ruiz: el hombre llevaba el brazo derecho escayolado y vestía una cazadora marrón marca Chevignon.

La Policía Científica determinó que el arma utilizada en el crimen también fue empleada en el atraco a un restaurante cercano días antes del crimen. Cuando fue detenido Jesús Borja, los agentes analizaron la chaqueta Chevignon y comprobaron que tenía restos de pólvora.

La vista oral se prolongará hasta el día 29 y está previsto que declaren 85 testigos, entre ellos los padres de Iván Ruiz. Estos lamentan "la falta de apoyo psicológico, legal, económico y moral por parte de las autoridades".