La Comunidad trata de deslegitimar las protestas de los profesores

Los profesores han mudado de piel varias veces en las últimas semanas. Primero pasaron por vagos. La presidenta Aguirre dijo públicamente que solo trabajan 20 horas y rectificó seis días después. Luego señaló que los que se concentraron el miércoles frente a la Consejería de Educación eran "liberados sindicales" y "algunos" profesores. Por esto último no se ha disculpado. Ayer les tocó asumir el disfraz de radicales.

Ayer, la consejera de Educación, Lucía Figar, señaló en unas declaraciones facilitadas por la Consejería: "Nadie entiende muy bien qué hacen los indignados del 15-M presentes en las asambleas, decidiendo si los profesores hacen huelga, no hacen huelga o qué día la hacen". Y ahonda: "Son los mismos que en agosto insultaban y agredían a peregrinos los que ahora opinan sobre asuntos del profesorado". El portavoz del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, también se pronunció sobre el "sesgo político" en una asamblea de docentes "en la que se ha dado entrada incluso a representantes del 15-M que ni siquiera son profesores".

"Hay representantes del profesorado que están en el 15-M. No excluimos a nadie", replica Eduardo Sabina, portavoz de Educación de UGT. "Tendrán que pedir perdón otra vez a los profesores por llamarnos radicales", añade Paco García (CC OO). Otro representante de los sindicatos mayoritarios, ANPE, matiza que el ambiente de la última asamblea, celebrada el jueves, le hizo salir "con mal cuerpo", según Francisco Melcón. "Había un sector minoritario muy radical", asegura.

La Consejería de Educación hizo públicas en julio las instrucciones de inicio de curso que ampliaban de 18 a 20 el número de horas lectivas. Ese cambio supone el recorte en la contratación de interinos (los sindicatos calculan que habrá 3.000 docentes menos y la consejería, que no da cifras, puntualiza que el año pasado solo se contrató a 1.700). Docentes, inspectores y sindicatos han alertado de los problemas que puede suponer esa merma de efectivos para el normal funcionamiento de los centros y para la atención a los alumnos más desfavorecidos.

Desde el pasado mes de julio, se han celebrado tres asambleas abiertas al público con un estilo similar al del 15-M, con intervenciones de cualquier participante, manos en alto o peticiones de ampliar más las reuniones. La última de ellas, celebrada el pasado jueves, fue la más tensa. Se extendió más de cinco horas. Hubo insultos, según testigos. Parte del público cuestionó el papel de los sindicatos, llamaron "mentirosos" a algunos de los intervinientes y pidieron abrir la convocatoria a vecinos, padres y otro tipo de representantes. Se habló pero no se votó. Las propuestas se están decidiendo en los claustros de profesores.Los cinco sindicatos mayoritarios de la enseñanza pública (CC OO, ANPE, UGT, CSIF y STEM) están recabando datos de los institutos mediante un cuestionario remitido a los profesores. Cada centro entrega sus resultados o los envía a un correo electrónico (consultasjuntasdepersonaldocente@gmail.com).

Según los últimos datos facilitados por las centrales, que continúan con el recuento este fin de semana, han respondido 8.700 docentes. Este número representa algo menos de la mitad del censo total. En la Comunidad de Madrid hay 21.457 profesores de secundaria, según recogen los presupuestos de 2011.

Los sindicatos ofrecieron los primeros datos el jueves durante la asamblea. Casi la totalidad de los docentes de secundaria que han votado (99,5%) rechazan las instrucciones de inicio de curso que fijan las 20 horas lectivas y el 98% respalda que haya movilizaciones. Lo que aún no está claro es cuándo empezarán los paros y cómo serán. El 57,3% está a favor de hacer huelgas alternas de tres días de martes a jueves a partir de la segunda semana de curso. Y está pendiente también ver cómo se desarrolla la jornada de paro solicitada formalmente para el día 14, inicio del curso en los institutos. En la asamblea del jueves, esta convocatoria quedó desdibujada después de que varios docentes protestaran porque no había una pregunta expresa sobre la fecha en el cuestionario remitido por los sindicatos y otros señalaran que es una jornada festiva en 19 localidades de la región.

Los sindicatos volverán a reunirse el lunes para el recuento final de los votos. Será entonces cuando anuncien si el 14 hay huelga o lo cambian por lo que han llamado "jornada de lucha" con asambleas en los centros, puntos de información para padres y alumnos y concentraciones. Si se confirman los paros alternos de tres días, comenzarían el próximo martes 20 de septiembre.