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Reportaje:Las minorías en Europa

Rumania roza la bancarrota

Tras años de crecimiento y frenesí consumista, la economía cayó un 7% en 2009 - El Gobierno recurrió al FMI y la UE para eludir la suspensión de pagos

Naiara Galarraga Gortázar

Constantina Artemisa, de 47 años, larga coleta, bata azul, es limpiadora en la Academia de Estudios Económicos de Bucarest. Su sueldo, que se ha quedado en 470 lei mensuales (110 euros) tras un hachazo del 25% por el plan de austeridad gubernamental, es el único ingreso en su hogar. Su marido y su hijo mayor, conductores, están en paro (oficialmente un 8% que nadie se cree) y tiene tres hijos más. "La situación económica es muy difícil, honestamente", dice. Rumania, el segundo país más pobre de la UE, ha vivido crisis mucho peores. Pero tras la borrachera económica que rodeó a su entrada en la Unión (al inicio de 2007) vino una dura resaca.

"El detonante fue la crisis mundial, pero es una crisis local y profunda", asegura el profesor Liviu Voinea, del Grupo de Economía Aplicada. En 2007 y 2008 el PBI creció más del 8%. Aquello era puro frenesí: las remesas de los trabajadores emigrantes eran enormes (10.000 millones al año), la inversión extranjera estaba en auge, el crédito estaba tirado y la gente se lanzó en masa a comprar cochazos, teles de plasma. "Los ingresos aumentaron y, en cuanto los políticos se vieron con ese dinero, subieron los sueldos de los funcionarios, las pensiones, en vez de invertir en infraestructura", explica el director editorial del diario económico Ziarul Financiar, Cristian Hostiuc. Y de repente, el bofetón. El PIB cayó un 7% en 2009 y se tuvo que pedir ayuda. Rumania acordó un préstamo de 20.000 millones de euros con el FMI y la UE en primavera de 2009. Parece insuficiente. El presidente, Traian Basescu, sugirió días atrás que quizá sea necesario ampliar el préstamo.

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Con el aliento del FMI en el cogote, Rumania bajó en julio un 25% los sueldos de los empleados públicos (son 1,3 millones, más de los que había en la dictadura de Nicolae Ceausescu), y recortó un 15% las muchas y diversas prestaciones sociales. Nicolae Borta recibe 56 euros mensuales por una minusvalía, más otros 10 euros por cada uno de sus cuatro hijos. Como no le llega, el miércoles recogía con su esposa, Elena, pan, leche, arroz, miel, lo básico, en un centro de distribución municipal en Bucarest. El Gobierno intentó rebajar también las pensiones pero el Tribunal Constitucional anuló la medida. De modo que subió el IVA cinco puntos, hasta el 25%.

Reformar el sistema de pensiones (a partir de la semana que viene, ex parlamentarios, ex diplomáticos y otros altos cargos las cobrarán en funcion de lo que contribuyeron, y algunos las verán reducirse hasta 10 veces) y pagar los 1.900 millones que el Estado debe a empresas privadas (la factura farmacéutica, por ejemplo) son los deberes que el FMI, que ya ha desembolsado 13.000 millones, ha puesto para este mes al Gobierno. El despido masivo de funcionarios está sobre la mesa (se habla de 200.000).

El primer ministro, Emil Boc, de centro-derecha, acaba de sustituir a seis ministros, incluido el de Finanzas, un tecnócrata reemplazado por un "desconocido del partido", según Hostiuc. Una remodelación que los expertos tildan de "maquillaje".

"Estas medidas de austeridad son incluso contraproducentes", opina Voinea. Sostiene que echar a los funcionarios a bulto, sin mirar si son eficaces, "es una estupidez". Su receta para salir de la crisis incluye mejorar la recaudación fiscal -"se estima que solo se recauda el 50% del IVA"-, un IRPF progresivo y reducir la contribución al equivalente a la seguridad social, que es el 46% del salario, "lo que empuja a muchos al mercado negro". Se calcula que la economía sumergida genera al menos un tercio de la riqueza. Para Otilia Nutu, de la Sociedad Académica Rumana, es imprescindible reformar las pensiones, que se han duplicado en los últimos cuatro años y a las que atribuye "la mitad del déficit".

Los analistas coinciden en que otra clave es que el Estado gaste con eficacia. Rumania, empatada con Bulgaria y Grecia como campeón de la corrupción en la UE, según Transparencia Internacional, tiene una "muy buena legislación anticorrupción" que no se aplica porque la UE no ejerce un control serio, según Elena Calistru, de esta ONG. El dinero se despilfarra a chorros en licitaciones públicas. La web porcisme.ro (cerdadas) ha sumado las corruptelas publicadas en los medios: 7.405 millones solo en los fraudes que son de dominio público.

Una familia de rumanos gitanos vende zapatos durante una festividad en Costesti, a 240 kilómetros de Bucarest.
Una familia de rumanos gitanos vende zapatos durante una festividad en Costesti, a 240 kilómetros de Bucarest.AFP

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Sobre la firma

Naiara Galarraga Gortázar
Es corresponsal de EL PAÍS en Brasil. Antes fue subjefa de la sección de Internacional, corresponsal de Migraciones, y enviada especial. Trabajó en las redacciones de Madrid, Bilbao y México. En un intervalo de su carrera en el diario, fue corresponsal en Jerusalén para Cuatro/CNN+. Es licenciada y máster en Periodismo (EL PAÍS/UAM).

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