Reino Unido convoca un gabinete de crisis tras la alerta terrorista

Un comité de crisis del Gobierno británico se reunió el viernes por la noche de urgencia para discutir su respuesta ante el descubrimiento, la noche del jueves, de un paquete sospechoso en el aeropuerto de East Midlands (a unos 150 km de Londres) con dirección a Chicago y la alerta por terrorismo lanzada por Estados Unidos, según ha informado una fuente oficial que ha querido subrayar la importancia de lo ocurrido.

Se trata de un comité del Ejecutivo llamado Cobra en el que participan los represetantes de los diferentes ministerios en caso de emergencia. Una reunión de la que la ministra del Interior británica, Theresa May, ya ha informado a la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Janet Napolitano, sobre los detalles de la reunión.

Por el momento, el Gobierno británico ha decidido suspender los vuelos directos entre Reino Unido y Yemen, país del que procedía el objeto sospechoso encontrado en el avión, porque "la seguridad de Reino Unido sigue siendo la prioridad número uno", afirmó la ministra de Interior. Un paquete que no fue encontrado por casualidad sino por el trabajo de la Inteligencia de Reino Unido, según fuentes antiterroristas británicas recogidas en The Guardian.

"En estos momentos, no hay nada que indique que algún lugar de Reino Unido pudiera ser atacado. Estamos considerando con urgencia los pasos necesarios en relación con la seguridad de los envíos de carga que se originan en Yemen", dijo.

La suspensión de los vuelos directos de carga desde Yemen se suma a la que está en vigor desde hace más de un año con respecto a la aerolínea Yemenia Airlines, en una decisión que fue prorrogada sin fecha concreta en enero de este año. Una decisión que se tomó después de que un joven nigeriano intentara supuestamente hacer explotar el día de Navidad un avión en pleno vuelo.

Un cartucho de tinta

El objeto que generó la alerta a ambos lados del océano Atlántico fue un cartucho de tinta de impresora, manchado con un polvo blanco y del que parecen salir algunos cables unidos a un dispositivo electrónico que fue localizado en el aeropuerto británico, que sirve a diario de punto intermedio a cientos de vuelos de carga que realizan transportes entre Asia y Africa, y América.

El hallazgo motivó la evacuación y acordonamiento del centro de distriución de carga del aeropuerto, que es utilizado por varias compañías, entre ellas UPS, DHL y el servicio británico de Correos, aunque esta medida de seguridad fue posteriormente retirada.