Lula subirá el sueldo a los funcionarios del Parlamento hasta un 38%

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se siente generoso a tres meses de las elecciones presidenciales en las que intenta con todas sus fuerzas que sea elegida, como su sucesora, la ex guerrillera Dilma Rousseff. Tras haberse negado a vetar un aumento del 7,7% del salario a los más de ocho millones de pensionistas, más de un 4% por en cima de la inflación, ayer tarde autorizó un aumento de hasta un 38% del sueldo de los 6.830 funcionarios de la Cámara baja, que ya gozaban de salarios de lujo si se comparan con el salario base.

En el aumento que va de un 15% mínimo hasta un 38% atañe a todos los funcionarios, tantos los que entraron con concurso, como los que entraron a dedo, así como a los funcionarios jubilados. Con el ajuste, el sueldo mínimo de 3.427 reales (1.550 euros) sube a 4.340 (1.963 euros) y el sueldo mayor de 13.185 reales (5.962 euros) sube para 17.352 (7.846 euros) sin contar la prima adicional por especialización. Los consultores legislativos serán los más aventajados: pasarán de un salario actual de 18.900 reales (8.545 euros) a 22.000 (9.947 euros). El salario base de un trabajador común es de 510 reales (231 euros).

Los diputados y senadores brasileños son quizás los que más ganan del mundo. Entre sueldo y beneficios varios pueden superar los 100.000 reales (45.220 euros) mensuales. El presupuesto de gastos de salarios del Parlamento pasará de los actuales 2.900 millones de reales (1.311 millones de euros) a 3.400 millones (1.537 millones de euros). Los funcionarios del Senado están también a la espera de otro aumento que aumentará en 380 millones de reales (172 millones de euros) el presupuesto.

El diputado Arnaldo Madeira, del partido socialdemócrata, el oposicionista PSDB, criticó estos aumentos en un año electoral: "Estamos en una fase creciente de gastos. Es la fiesta de los últimos días de Pompeya".

El peligro que ven en estos aumentos los analistas económicos es que pueda ahora desencadenarse toda una serie de reivindicaciones de otras categorías. En el poder judicial, por ejemplo, ya se habla de un aumento de un 56 % de los sueldos. El líder del gobierno del Parlamento, Candido Vaccarezza, del Partido de los Trabajadores (PT) fue ayer cercado y abucheado por policías que esperan también una reestructuración de sus sueldos- ellos sí muy bajos-, que podrían llegar a 3.500 reales (1.582 euros) para militares y bomberos y de 7.000 (3.165 euros) para los oficiales, lo que supondría a las arcas públicas un impacto de 25.000 millones anuales.

Lula ha vuelto a defender los aumentos tanto de los pensionistas como el de los funcionarios del Parlamento alegando que hará crecer el gasto interno y con ello el aumento de entradas de impuestos.