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El Constitucional echa por tierra la ley de inmunidad que protege a Berlusconi

El primer ministro culpa al presidente de la República de que la Corte no diera el visto bueno a la ley.-La decisión del tribunal italiano, por nueve votos a seis, abre la puerta al procesamiento de 'Il Cavaliere'

La Corte Constitucional italiana ha declarado inconstitucional por nueve votos a seis la ley de inmunidad conocida como Laudo Alfano que mantiene paralizados cuatro procesos contra el primer ministro, Silvio Berlusconi. La decisión es el peor escenario previsto por los abogados del magnate milanés. La Corte considera que la ley atenta contra dos artículos de la Constitución: el 138 (la inmunidad de los altos cargos debe legislarse por la vía constitucional y no por la ordinaria) y el artículo tres (todos los ciudadanos son iguales ante la ley). La consecuencia inmediata es que al menos dos de los cuatro procesos abiertos por los jueces contra Berlusconi podrán ser reabiertos.

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El fallo del Alto Tribunal ha llegado al borde de las seis de la tarde, después de tres sesiones dedicadas a analizar el laudo, y fue tomado por mayoría de la sala. La decisión desprecia con argumentos estrictamente jurídicos las crecientes presiones políticas ejercidas en los últimos días por los medios de Berlusconi y sus propios ministros.

Ataque a Napolitano

En sus primeras declaraciones públicas tras conocer el veredicto, el primer ministro ha acusado a la Corte Constitucional de "ser de izquierdas" y ha asegurado que seguirá "para adelante con o sin la norma" porque "estas cosas me importan un pepino". Berlusconi ha explicado que con "once jueces de izquierdas" era imposible que ratificaran la ley. Fiel a su estilo, el primer ministro ha afirmado que este tipo de sucesos le dan energía y ha exclamado: "¡Viva Italia! ¡Viva Berlusconi!".

Horas después, Il Cavaliere ha acudido al programa de la RAI Porta a porta, donde ha extendido sus críticas al presidente de la República, Giorgio Napolitano. "Él habia garantizado con su firma que la norma era válida pero después no ha influido en los jueces de izquierda para que dieran el visto bueno a la ley", ha denunciado.

Durante la mañana, el líder de la Liga Norte y ministro del Gobierno, Umberto Bossi, amenazó con "recurrir" al pueblo si los jueces tumbaban la ley Alfano. "Nosotros tenemos el pueblo", dijo Bossi, "pero yo estoy por la prudencia. ¿Quién querría retar la ira de los pueblos?". La intimidación del líder padano al Tribunal mientras éste se encontraba reunido a puerta cerrada para deliberar sobre una ley clave para el futuro político de Italia irritó a la oposición. Dario Franceschini, secretario general del Partido Democrático, afirmó que Bossi "obvia el más elemental conocimiento de las reglas de la democracia".

La decisión de la Corte fue apoyada por varios constitucionalistas, entre ellos Alessandro Pace, el representante de la Fiscalía de Milán (impulsora de dos de los tres recursos contra la ley Alfano) que no fue autorizado por la sala a participar en la audiencia pública del martes. A juicio de Pace, el Laudo Alfano "viola la Constitución en cinco puntos: el principio de igualdad; el automatismo generalizado porque se aplica incluso si se viola o se mata; la duración irracional del proceso; el tratamiento diverso a los presidentes y a los organismos que presiden; y la aprobación por ley ordinaria y no constitucional".

Berlusconi se reunió con sus ministros más cercanos en el palazzo Chigi en torno a las cuatro de la tarde. Seguramente sabían ya que el Tribunal iba a rechazar, por segunda, vez, el intento de elaborar leyes personales para salvar a Berlusconi de la acción de la justicia.

Silvio Berlusconi, en una imagen tomada el 27 de septiembre durante un mitin en Milán.
Silvio Berlusconi, en una imagen tomada el 27 de septiembre durante un mitin en Milán.AP
Los jueces han decidido levantar la inmunidad a los cuatro altos cargos del Estado.Vídeo: AGENCIA ATLAS

Cuatro procesos paralizados

El Laudo Alfano ha paralizado cuatro procesos contra Silvio Berlusconi.

- 'Caso Mills'. Según la fiscalía, Berlusconi pagó 410.000 euros al abogado inglés David Mills, especialista en crear sociedades opacas en paraísos fiscales, para que testificara a su favor y mintiera en sede judicial durante los procesos All Iberian y Guardia de finanzas. Mills mintió a los jueces sobre el papel principal de Berlusconi en la estructura offshore creada para él por el abogado "para actividades ilegales y operaciones reservadas de Fininvest". Mills ha sido condenado en primer grado, aunque se declara inocente. La juez Gandus tiene la certeza de que el corruptor es Berlusconi. Pero, por ley, el juicio de Berlusconi debería comenzar de cero porque ya se sentenció al primer imputado.

- 'Caso Mediaset'. Dos sociedades offshore creadas por Mills compraron y vendieron entre 1994 y 1999 derechos de televisión y cine por 470 millones de euros. La Fiscalía de Milán cree que esas sociedades revendían los derechos a sucesivas empresas gemelas de Berlusconi, encareciendo el precio en cada pase. La diferencia entre el valor inicial y el valor final permitía crear millones de euros en dinero negro. Berlusconi tiene pendiente una acusación por fraude fiscal y otra por balance falso.

- 'Caso Mediatrade'. En fase de investigación preliminar, el fiscal De Pasquale cree que Berlusconi era el socio oculto de un intermediario, el egipcio estadounidense Frank Agrama, que compraba derechos a las majors americanas y luego los revendía a Fininvest y a Mediaset hinchando los precios. La técnica, similar a la anterior, serviría para detraer recursos al fisco italiano y al estadounidense y a los otros accionistas. Posible apropiación indebida y fraude fiscal.

- 'Caso de los senadores'. La Fiscalía de Roma (a diferencia de la de Milán, favorable a Berlusconi) solicita el archivo. Algunas escuchas telefónicas, ya publicadas, permitieron saber que, cuando era jefe de la oposición, además de recomendar a velinas y actrices al jefe de RAI Ficción, Agostino Saccà, Berlusconi conspiraba con dos senadores del centro-izquierda elegidos en el extranjero para que hicieran caer al Ejecutivo de Romano Prodi, que finalmente cayó, pero gracias al tránsfuga Clemente Mastella. La acusación es la de instigar a la corrupción.

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