12 policías y guardias civiles, acusados de proteger clubes nocturnos de Vigo
La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Vigo (Pontevedra), Neli da Cid, investiga a una docena de policías y guardias civiles supuestamente corruptos. Las irregularidades se relacionan, entre otras, con la protección de pubs, algunos vinculados con la. prostitución y el narcotráfico, y la regularización ilegal de extranjeros. Estas diligencias derivan del sumario en torno al presunto proxeneta de esta ciudad Telmo Domínguez, detenido el pasado junio por la Brigada Anticorrupción de la policía, que investigaba sus conexiones con agentes.
El nombramiento hace más de un año del actual, comisario jefe de Vigo, Luis Manuel García Mañña, ha venido seguido de una serie de medidas para erradicar actuaciones sospechosas de corrupción. Ante la observación de que un elevado número de los 300 policías que integran la Brigada de Seguridad Ciudadana de esta localidad protegía conocidos locales nocturnos se iniciaron investigaciones internas para depurar tales conductas. Las pesquisas concluyeron en la apertura de expedientes sancionadores a ocho policías, aún pendientes de resolución.El número de policías que se beneficiaba de este doble salario era cinco veces más alta, según fuentes de la investigación. Algunos de los locales protegidos por policías eran centros de prostitución y comercio de droga que visitaban por placer o negocios algunos de los presuntos capos del narcotráfico detenidos en la Operación Mago. Asiduo del club Telmos era José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, según una declaración judicial.
Ocho expedientados
Según fuentes de la investigación, los agentes expedientados se repartían así: dos policías protegían al Telmos, otros dos a No se lo Digas a Mamá y otros cuatro al Miramar, en Redondela. El que reunía características más inquietantes era el Telmos, que, según fuentes policiales, era objeto de una investigación de la brigada de estupefacientes cuando actuó contra él la Brigada Anticorrupción. Paralelamente, García Mañá destinó a otras funciones al comisario responsable de Seguridad Ciudadana, de quien dependendían jerárquicamente los protectores.A principios (le año, la Brigada Anticorrupción se metió de lleno en el caso ante las repetidas declaraciones de delincuentes de que el Telmos poseía protección policial y de que la connivencia podía rozar delitos mayores, como el asesinato de una prostituta. El pasado junio, esta brigada irrumpió en el Telmos; requisó diverso material y detuvo a su propietario, Telmo Domínguez. En la operación no se incautó material comprometedor para los agentes protectores, según fuentes de la investigación.
La juez que lleva este caso, Cristina Jariod, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo, pidió y obtuvo de la Guardia Civil un pormenorizado estudio patrimonial de los agentes sospechosos, pero sus ingresos aparentemente coincidían con los salarios, oficiales. En todo caso, una docena de agentes, en su inmensa mayoría policías, aparecen citados en ese sumario como implicados en diversos casos de corrupción.
La Brigada Anticorrupción, según fuentes policiales, también indagó las posibles conexiones policiales con la muerte, el 12 de agosto de 1988, de una prostituta supuestamente empleada en el Telmos, indagaciones que no arrojó ningún elemento incriminatorio sobre policías, si bien las pesquisas continúan por vía judicial. Fuentes de la investigación estiman probable que la fiscalía pida una ampliación del informe patrimonial sobre la docena de agentes sospechosos.
Otro foco de esta red de corrupción parece estar situado en funcionarios del paso fronterizo de Salvatierra, donde un guardia civil ya fue detenido y dos policias llamados a declarar semanas atrás. Aparentemente, agentes de este puesto facilitaban el asentamiento irregular de extranjeros.
La Brigada Anticorrupción se halla a la espera de que la autoridad judicial reclame de nuevo su colaboración para nuevas diligencias, algo que no se descarta en los juzgados de Vigo.
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